Luego de analizar durante dos semanas la solicitud de asilo político en Uruguay del ex presidente peruano Alan García, el Poder Ejecutivo decidió no concederlo. Así lo anunciaron ayer en una conferencia de prensa el presidente Tabaré Vázquez y el canciller Rodolfo Nin Novoa, tras la reunión del Consejo de Ministros.

Vázquez explicó que la decisión responde a razones “estrictamente jurídicas”. Para el análisis del caso se hizo un “profundo estudio de la situación” y se tomó en cuenta la información enviada por el gobierno peruano y por el ex presidente de Perú, dejando de lado “toda otra comunicación” por parte de organizaciones gubernamentales, instituciones internacionales de derechos humanos y de dirigentes políticos, entre otros, indicó.

Nin Novoa recordó que García se refugió en la embajada uruguaya en Perú apelando a lo dispuesto en la Convención de Caracas sobre Asilo Político, de 1954, donde se establece que el gobierno “no está obligado” a otorgar el asilo diplomático y tampoco a explicar por qué lo niega si decide hacerlo, además de estipular que “no es lícito” concederles asilo a personas que se encuentren inculpadas o procesadas por la Justicia.

El canciller afirmó que las investigaciones judiciales que están en marcha contra el ex presidente peruano “no constituyen persecución política” y que pesan sobre él imputaciones “vinculadas mayoritariamente” con eventuales delitos económicos y administrativos desarrollados durante sus dos gestiones como presidente (1985-1990 y 2006-2011). Por todo esto, el Poder Ejecutivo resolvió negarle el asilo político a García, indagado por presuntos delitos de corrupción vinculados con la trama internacional de sobornos de la empresa constructora brasileña Odebrecht. “No hemos concedido el pedido de asilo, entre otras cosas, por los elementos jurídicos mencionados y también porque en Perú funcionan autónomamente y libremente los tres poderes del Estado”, expresó Vázquez. Nin apuntó que el Ejecutivo le pidió al embajador uruguayo en Perú, Carlos Barros, que invitara a García a retirarse del domicilio de este diplomático, donde estaba residiendo, y Vázquez acotó que García debía retirarse por sus propios medios, añadiendo: “De la misma manera que llegó, tiene que salir”. También se informó que habría una comunicación oficial al canciller de Perú, Néstor Popolizio, para informarle acerca de la decisión.

Las repercusiones en Perú

Al conocer la decisión del gobierno uruguayo, el ex presidente peruano abandonó ayer de mañana la residencia de Barros. García afirmó que estará en su domicilio “a disposición de todas las investigaciones” y asistirá “con puntualidad” cuando sea convocado por la Justicia, según informó en una carta difundida en Twitter por el Partido Aprista Peruano (PAP), agrupación a la que pertenece.

Al igual que cuando pidió asilo político, el ex mandatario aseguró que “no existe ninguna” prueba que lo vincule con “ningún hecho delictivo” y “mucho menos” con la empresa Odebrecht. Sobre las denuncias en su contra, García insistió en que se trata de “rumores” y “especulaciones”, que “jamás” podrán ser comprobadas porque son “totalmente falsas”.

Tras conocerse públicamente la decisión del gobierno uruguayo, el presidente peruano Martín Vizcarra se pronunció en su cuenta de Twitter: “En Perú nadie tiene corona. Nuestra democracia garantiza la independencia de poderes y el debido proceso”. Por su parte, el presidente del Consejo de Ministros, César Villanueva, dijo en declaraciones a Canal N, recogidas por La República de Perú, que la decisión del gobierno uruguayo ha “ratificado que, en el caso peruano, hay un estado de derecho, hay una democracia plena”, y que se “confirma plenamente que no hay una persecución política”.

En tanto, el secretario general del PAP, Elías Rodríguez, aseguró en declaraciones a América Noticias que su partido respeta la resolución uruguaya, aunque precisó que son “decisiones que con la historia se evaluarán”. Acotó que la ciudadanía no se sentirá “desairada”, porque tiene “la seguridad” de que García actuó “con honestidad” en sus dos períodos de gobierno.

Por casa

Varios políticos se pronunciaron ayer sobre la decisión tomada por el Poder Ejecutivo. Desde el Frente Amplio, la senadora Constanza Moreira escribió en su cuenta de Twitter que saludaba al gobierno por la resolución adoptada, y resaltó la “importancia de comprometerse a colaborar y luchar contra la corrupción e impunidad”. Por su parte, el diputado Roberto Chiazzaro calificó la decisión de “excelente” y manifestó que se actuó “conforme al derecho internacional”.

Los principales líderes de la oposición también expresaron su beneplácito por el rechazo al pedido de asilo. Dentro del Partido Nacional, tanto el líder de Todos, Luis Lacalle Pou, como el de Alianza Nacional, Jorge Larrañaga, saludaron lo resuelto por el Ejecutivo. En la misma red social, Lacalle Pou consideró que fue “una buena decisión”.

El precandidato colorado Ernesto Talvi, líder de Ciudadanos, dijo en una conferencia de prensa realizada en la Federación Rural que el asilo es una institución que nació para “darles protección a los perseguidos políticamente”, pero que en este caso García “está siendo indagado por una Justicia independiente”, por lo que considera que Vázquez “tomó la decisión correcta”.