La policía israelí recomendó a la Fiscalía que acuse de soborno, fraude y abuso de confianza al primer ministro, Benjamin Netanyahu, por dos casos distintos de corrupción. En uno de ellos, la investigación policial concluyó que Netanyahu aceptó sobornos y cometió fraude y abuso de confianza al recibir regalos costosos para él y para su familia,de parte del empresario Arnon Milchan, a cambio de favores políticos. En el otro, se sospecha que cometió los mismos delitos al pactar con Arnon Mozes, el editor de uno de los diarios más grandes de Israel, Yediot Aharonot, para que hiciera una cobertura positiva de sus actividades a cambio de perjudicar la distribución de uno de los diarios rivales, Israel Hayom.

Después de que se conociera la recomendación de la Policía, Netanyahu, que siempre se declaró inocente, dijo a periodistas que la solicitud es una “difamación” sin “ningún fundamento”, y cuyo objetivo es sacarlo del cargo de primer ministro. Afirmó que lo seguirá ejerciendo “de manera responsable y fiel”.