El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, anunció que impulsará de manera prioritaria la exhumación y el traslado de los restos del ex dictador Francisco Franco fuera del Valle de los Caídos, el monumento en el que están enterrados franquistas y también sus víctimas. El vocero del gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Óscar Puente, dijo ayer que la propuesta tiene que ver con la reactivación de la Ley de Memoria Histórica por parte del nuevo Ejecutivo. En este sentido, adelantó que la idea es transformar el Valle de los Caídos en “un lugar de reconciliación y memoria” y no en un santuario de “exaltación” de la figura de Franco. “Un gobierno de todos y para todos no puede aceptar símbolos de exaltación de una dictadura condenada por la historia”, argumentó Puente. El portavoz agregó que no se trata de una cuestión “urgente”, pero sí precisó que “es el momento”.

Puente adelantó, por otro lado, que las medidas que tomará el gobierno en el marco de esta política tendrán como base acuerdos que ya fueron aprobados en el Congreso. De todas maneras, el principal objetivo –agregó– será “buscar el máximo consenso entre las fuerzas políticas”.

Si Sánchez decidiera someterla al debate parlamentario, es muy posible que la propuesta cuente con los votos necesarios. El secretario de Análisis Estratégico y Cambio Político del partido de izquierda Podemos, Íñigo Errejón, dijo en declaraciones al diario madrileño El País: “Hay una mayoría a favor en el Congreso. Lo sorprendente es que hayamos tardado 40 años en hacerlo”. El también diputado aseguró que el hecho de que los restos de Franco continúen enterrados en el Valle de los Caídos es lo que convierte al lugar “en un centro de exaltación del genocidio y la represión”.

En tanto, la portavoz nacional y líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, declaró el domingo en un acto en Barcelona que su formación está “abierta a sentarse para consensuar una solución” sobre el Valle de los Caídos para “pasar de una etapa de confrontación a una de reconciliación”. “Me parece que es necesaria”, agregó. Ya en marzo, el líder del partido de derecha, Albert Rivera, había afirmado al respecto que “un dictador no es la mejor persona para reconciliar a una sociedad”.

El Partido Popular, por el momento, insiste en que el traslado provocaría un “enfrentamiento” en la sociedad que “no aportaría en nada”, como dijo la vicesecretaria de Estudios y Programas de la formación conservadora, Andrea Levy.

Con el respaldo del PSOE, Podemos y Ciudadanos, los votos a favor de la iniciativa sumarían 188, es decir, 13 más de los que se requieren para aprobarla.