“Vamos a sentarnos”, dice Aníbal Gloodtdofsky, cofundador de Somos Todos –lista 151515–, agrupación del Partido Colorado que había nacido como La Atchugarry pero se cambió de nombre, porque el hijo del ex ministro de Economía y Finanzas no estaba de acuerdo con el uso del apellido. Las personas que están en la pizzería El Horno de Juan, en José Martí y Juan Benito Blanco, le hacen caso y se acomodan en sus mesas. De fondo se ve el partido de Racing y River Plate (argentinos) por la Copa Libertadores. Van 0 a 0. “Esto es un local comercial, y por ello hemos evitado convertirlo en un comité. En tal sentido, vamos a tener que hacerlo a capela, así que les ruego atención”, explica Gloodtdofsky. Acto seguido, comenta que está por venir el senador José Amorín Batlle, líder de Uruguay Batllista, al que Somos Todos apoya como precandidato a la presidencia. Claudio González, secretario general del sector, se coloca en medio de dos hileras de mesas, agradece la presencia de todos y comenta: “Si las encuestas dicen que estamos en el 9%, yo creo que estamos en el 15, 16, 18, y vamos a estar en más”. “Esto tiene que cambiar, vamos a cambiarlo nosotros, porque somos todos: Pocitos, Belvedere, La Teja, Pando, donde sea, somos todos, y vamos a cambiar el gobierno, quieran o no”, agrega.

De repente, los flecos de nailon que no dejan que el frío entre al bar se van abriendo, y aparece un señor de sombrero negro. “Un gran aplauso, el invitado especial que todos esperábamos, el doctor Julio María Sanguinetti”, dice González. El ex presidente se abre camino entre las mesas y saluda. “Venía a desearles buena suerte, no vengo a participar en la oratoria”, aclara, y añade: “Tengo un espíritu fraterno con estos amigos de toda la vida. Estamos abriendo una primavera de partido en pleno invierno, porque en los últimos dos meses hemos cambiado el humor y el talante, y hoy estamos todos optimistas y con ganas”. Antes de irse, el ex presidente dice a la prensa que si bien hoy lidera el sector Batllistas, es un hombre “de todo el partido”, y afirma que el PC salió de la “desazón” que había luego del alejamiento de Pedro Bordaberry, que dejó a “mucha gente desconcertada”.

El partido sigue 0 a 0. La gente aplaude la llegada de Amorín Batlle. El senador empieza su discurso refiriéndose al revuelo que armó el video publicitario de Somos Todos en el que usan la música de la canción partisana “Bella ciao”, y les manda un mensaje a los comunistas que se ofendieron: “Decían que era una canción partisana comunista, pero me puse a leer un poco, y vi que entre los partisanos italianos había comunistas, socialistas, monárquicos, demócratacristianos y liberales. Y el grupo más importante de los partisanos se llamaba José Garibaldi, nuestro héroe liberal del siglo XIX, así que me quedé contento de que eso fuera así”, señala. Además, opina que los comunistas estaban contra Benito Mussolini “porque eran iguales pero del otro lado, estaban a favor de [Iósif] Stalin”.

Luego cuenta que hace unos días un señor en La Teja le dijo: “Soy bien de izquierda, ¿y sabe una cosa? No los voto nunca más”. “Eso era imposible hace cinco años, que no podíamos entrar a La Teja sin que nos miraran mal, pero hoy la gente está cambiando, porque hay una cantidad de cosas que no se toleran más”, explica el senador.

“El Frente Amplio vino con ilusión de la gente, pero ha demostrado que es incapaz de cambiar absolutamente nada, porque no saben. Nos dicen que está todo bien, entonces, cuando le decimos [al ministro del Interior, Eduardo] Bonomi que es un desastre, nos dice que sus resultados son mejores que los del FBI. No sabés si reírte o llorar”, dice Amorín.

El partido sigue 0 a 0 y Amorín sigue con el tema de la seguridad. Arremete contra Bonomi con ironía: “Los homicidas se enteraron del nuevo Código [del Proceso Penal] y salieron a matar gente”. “Como hizo él”, dice un hombre del público. “Pero no había nuevo Código”, contesta el senador.