Gobernadores, fiscales y legisladores estadounidenses intentaron en los últimos días impedir la divulgación en internet de manuales para fabricar armas con impresoras 3D. La administración anterior, de Barack Obama, los había prohibido bajo el argumento de que violaban las leyes que regulan la exportación de armas de fuego. Pero el grupo Defense Distributed, que milita a favor de las armas, inició una acción legal contra esa decisión, y en junio logró llegar a un acuerdo con el actual gobierno.

Según la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, la administración del presidente Donald Trump tuvo que acordar porque fue “informada” de que perdería el caso debido a que se privilegiaría la Primera Enmienda de la Constitución, que protege la libertad de expresión.

Estaba previsto que a partir de hoy el grupo Defense Distributed publicara instrucciones para fabricar ese tipo de pistolas y rifles. Sin embargo, uno de los intentos de impedirlo obtuvo resultados anoche. El juez federal Robert Lasnik, del estado de Washington, bloqueó esa publicación porque implicaría “una probabilidad de daño irreparable”.

Su fallo responde a la acción de fiscales de ocho estados y de Washington DC, que pidieron a la Justicia que dispusiera una medida cautelar contra la publicación de los planos. “Estas pistolas no están registradas y son muy difíciles de detectar, incluso con detectores de metales, y estarán disponibles para cualquier persona, independientemente de su edad, estado mental o antecedentes penales”, argumentó Bob Ferguson, fiscal del estado de Washington.

Organizaciones civiles como el Centro Brady para Prevenir la Violencia de las Armas de Fuego o Everytown for Gun Safety también recurrieron a un tribunal, en este caso de Texas, donde tiene sede Defense Distributed, con el objetivo de frenar el acuerdo judicial.

A sus esfuerzos se sumaron los de Bill Nelson, senador demócrata por Florida, quien presentó, con apoyo de otros 20 integrantes de su bancada, un proyecto de ley para prohibir que los planos se divulguen. Una iniciativa similar presentó el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, en este caso para prohibir la fabricación de armas por parte de particulares en el territorio de su estado, y exigió además a Defense Distributed que restrinja el acceso a su página web desde Nueva York, bajo amenaza de iniciar acciones legales.