El diputado nacionalista y evangelista Gerardo Amarilla dijo a la diaria que la decisión del Ministerio de Turismo (Mintur) de dejar sin efecto la declaración de interés turístico del II Congreso Sudamericano por la Vida y la Familia –en el que participará él, junto a otros como el argentino Agustín Laje y el pastor de la Iglesia Misión Vida, Jorge Márquez– es una acción “tan contradictoria y tan dudosa”, que entiende “necesario” citar a la ministra Liliam Kechichián a la Comisión de Turismo de la Cámara de Diputados.

Amarilla, junto al diputado Álvaro Dastugue, otro de los oradores del evento, presentarán por escrito una solicitud ante la Comisión de Transporte para que la jerarca asista durante la segunda semana de octubre y rinda cuentas sobre la decisión adoptada por el ministerio. En su opinión, existe “una aparente violación al procedimiento administrativo” y por eso “nos gustaría conocer cuáles son las fundamentaciones” de la ministra. Amarilla considera que desde el punto de vista jurídico la decisión “es un poco inconsistente”, ya que cuando un ministerio acepta una solicitud, si la quiere revocar, tiene que seguir las pautas del procedimiento administrativo. “Después de que pasan diez días la resolución queda firme, no se puede revocar ante el planteo de un tercero”, manifestó, y agregó que, además, el Estado tiene que “darle vista” a la parte involucrada antes de tomar una decisión final. “En principio, hay algunas normas del derecho administrativo que no se han cumplido”, recalcó. Para Dastugue, es llamativo que la ministra haya dicho un día que el evento contaba “con todos los requisitos para ser declarado de interés turístico nacional” y “de un día para el otro parece que el evento se quedó sin requisitos”, por lo que considera “importante” saber qué fue lo que ocurrió para que “cambie de opinión”.

Según Amarilla, el Mintur está encargado de “resolver si los eventos son de interés turístico o no”; no le compete “analizar los contenidos y definir cuáles apoya o no”. Eso, añadió, está “por fuera de su marco de competencia”, por lo que podría existir “una vulneración a la libertad de expresión”. Para el diputado, lo que opinó la ministra se contradice con la resolución que posteriormente sacó el Mintur. “A mí me gustó lo que dijo ella en un principio: el ministerio no tiene por qué evaluar los contenidos de los congresos, le corresponde solamente ver si cumplen con los protocolos y con eso le basta”.

En tanto, la Junta Departamental de Maldonado mantuvo la declaración de interés departamental del evento. Si bien el punto fue votado por unanimidad a fines de agosto, el coordinador de bancada del Frente Amplio, Washington Martínez, explicó que el apoyo de su bancada “no fue voluntario” y admitió que se equivocaron al votar, porque no sabían cuál era el contenido de la actividad. El evento, según Martínez, “va en contra del pensamiento” de su bancada, pero una vez que se vota, es muy difícil revocar la resolución, por lo que tan sólo pudieron publicar un comunicado aclarando su postura. Por otra parte, el presidente de la junta, Luis Artola, dijo que la resolución se votó por unanimidad y considera que desde el FA “no se dice la verdad” porque ellos sabían “de qué iba el congreso”. El edil dijo que el Partido Nacional no buscará mecanismos para rever la resolución. “Si somos tan liberales como somos, cada uno puede opinar lo que desea”, sostuvo.