La primera ministra Theresa May logró que el Parlamento británico le ratificara ayer la confianza para seguir en el gobierno de Reino Unido. Sin embargo, la dirigente conservadora superó por sólo 19 votos en más de 600 la moción de censura presentada por el líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, en la Cámara de los Comunes, donde necesitaba el apoyo de la mitad de los legisladores. Reunió 325 votos a favor y 306 diputados se pronunciaron en su contra.

Durante el debate parlamentario, Corbyn comparó al gobierno conservador con un zombi y le pidió a May que renunciara y llamara a elecciones anticipadas. Un día antes, el Ejecutivo había sufrido lo que el líder opositor consideró la “peor derrota” de un gobierno en “la historia de la democracia” británica, cuando 432 diputados votaron contra el plan de brexit que la primera ministra acordó con la Unión Europea (UE) y sólo 202 lo respaldaron. “Cualquier otro primer ministro que se hubiera enfrentado a una derrota de la escala de la que sufrió” May el martes “habría dimitido”, dijo Corbyn, que acusó a la gobernante de haberle “fallado al país”.

Por su parte, May consideró que adelantar las elecciones es “lo peor que se puede hacer” en medio de la crisis actual. “Aumentaría la división cuando necesitamos unidad, implicaría caos cuando necesitamos certezas y supondría retrasos cuando necesitamos avanzar”, afirmó.

La jefa de gobierno descartó también la posibilidad de frenar el proceso de brexit para evitar una salida automática del bloque el 29 de marzo. Según citó la agencia de noticias Efe, May argumentó que una acción de ese tipo “significaría seguir en la UE y no cumplir los resultados del referéndum” de 2016, en el que se aprobó la salida de Reino Unido de la UE.

Uno de los principales promotores de esa consulta, Nigel Farage (ex líder del Partido de la Independencia del Reino Unido, fundado para impulsar el brexit), dijo ayer que ahora se repitiera esa consulta, el respaldo a la salida de la UE sería mayor que en la votación de 2016, informó Europa Press. Pero acerca de May, Farage opinó que su liderazgo fue un “fracaso total” y que “si tuviera sentido del honor, se iría antes de la hora del almuerzo”.

Por su parte, May defiende su gestión. Una vez que fue confirmada en su cargo, la primera ministra volvió a manifestar su intención de “cumplir con la solemne promesa” de aplicar el resultado del reférendum, y dijo que su gobierno tiene “la responsabilidad de identificar un camino hacia adelante” que le “permita obtener el apoyo” de la Cámara de los Comunes. Tanto el Partido Democrático Unionista de Irlanda del Norte, que apoya a la primera ministra, como los sectores euroescépticos del gobernante Partido Conservador reclaman volver a negociar con la UE. Sin embargo, el bloque no está dispuesto a volver a discutir el acuerdo que fue rechazado el martes por el Parlamento británico.

En este escenario, parte de la oposición se inclina a volver a consultar a los británicos. Cuatro partidos opositores –el Verde, el Liberal Demócrata, el Nacionalista Escocés y el Plaid Cymru, de Gales– le pidieron ayer a Corbyn que apoye la convocatoria a un nuevo referéndum. “Creemos que el único camino hacia adelante es convocar una votación popular sobre el acuerdo final” del brexit, le manifestaron en una carta. También unos 70 de los 256 diputados laboristas le solicitaron por escrito al líder de su partido que apoyara esa consulta al momento de debatir la moción de censura al gobierno. Pero Corbyn consideró que debía enfocarse en pedir la dimisión de May.

Anoche, la primera ministra llamó a los partidos a que antepongan el “interés nacional” y accedan a una solución acordada para la salida de la UE. Mientras tanto, este bloque se prepara para la posibilidad de un brexit sin acuerdo. Según informó Europa Press, el negociador europeo para el brexit, Michel Barnier, dijo ayer: “Estamos a 16 de enero, a sólo diez semanas del final de marzo, que es el momento que eligió el gobierno británico para pasar a ser un país tercero. Nunca como hoy [...] el riesgo de un ‘no acuerdo’ pareció tan elevado”.