El retorno a su país de Juan Guaidó transcurrió sin incidentes, y el opositor encabezó un acto masivo en la plaza Alfredo Sadel, en Caracas. Durante su discurso, el titular de la Asamblea Nacional y autoproclamado presidente encargado convocó nuevas manifestaciones masivas en todo el país para el sábado, para aumentar la presión contra el gobierno que preside Nicolás Maduro. “El sábado continuamos en las calles, toda Venezuela vuelve a las calles. No nos quedaremos ni un segundo tranquilos hasta lograr la libertad”, dijo Guaidó.
El dirigente volvió a Caracas en un vuelo comercial proveniente de Panamá, luego de recorrer la semana pasada Brasil, Paraguay, Argentina y Ecuador reforzando los apoyos que tiene en la región. En su llegada al aeropuerto de Maiquetía, Guaidó hizo los trámites migratorios con total normalidad y después fue recibido por los embajadores de Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Perú, Ecuador, Estados Unidos, Alemania, España, Francia, Países Bajos, Portugal y Rumania, quienes acudieron para dar garantías al dirigente político. En su cuenta de Twitter, Guaidó afirmó que la presencia de estos diplomáticos era “una demostración del firme compromiso del mundo” con la “democracia”.
El gobierno de Maduro, mientras tanto, actuó con extrema cautela ayer y únicamente se manifestó sobre el retorno de Guaidó mediante un mensaje de la vicepresidenta Delcy Rodríguez. Durante una entrevista, Rodríguez dijo que durante una entrevista televisiva dijo que “su comportamiento, sus actividades, serán cuidadosamente analizadas por las instituciones del Estado” y “se tomarán medidas apropiadas”.
Rodríguez también afirmó que Guaidó “fue una persona que en una plaza pública se autoproclamó presidente, lo que podría parecer realmente extravagante para Venezuela”, y “ahora lleva esta extravagancia y ridiculez a algunos países, cuyos gobiernos son satélites del mandato de Estados Unidos”.
La vicepresidenta informó que “el gobierno venezolano posee instituciones sólidas y sostenibles”, y agregó: “Todo esto está contemplado en nuestra legislación penal y está contemplado también en todo lo que tiene que ver con el marco jurídico de nuestras instituciones. Así que las instituciones venezolanas seguirán preservando el Estado de derecho en el país”.
Juan Guaidó, durante un acto ayer, a su llegada a Caracas.
Foto: Federico Parra
Más allá de estas declaraciones, el gobierno no obstaculizó la masiva manifestación que se desarrolló en la plaza Alfredo Sadel, donde Guaidó fustigó a Maduro y volvió a pedir el apoyo de las Fuerzas Armadas para destituir al presidente, a quien volvió a tildar de “usurpador”. En su discurso, Guaidó continuó: “Las Fuerzas Armadas, ¿qué más van a esperar?, ya vieron como más de 700 oficiales están del lado de la Constitución, y por ahí hay unos cínicos que están diciendo que es poco. El momento es ahora. Tenemos que generar el cambio en Venezuela”.
El dirigente informó además que hoy se reunirá con representantes de los empleados públicos y los sindicatos, sectores a los que consideró “secuestrados” por el gobierno. Por otra parte, afirmó que hará “un anuncio importante al país”.
El retorno de Guaidó a Venezuela fue observado atentamente desde el exterior. El vocero de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Stéphane Dujarric, dijo ayer que sigue “de cerca” la situación, al tiempo que remarcó que la ONU sigue estando “muy preocupada” por Venezuela. El portavoz, según informó la agencia de noticias Efe, también insistió en que la “situación sólo se puede solucionar con un diálogo político”, posición en la que la ONU ha insistido en numerosas ocasiones.
Por su parte, la alta representante para las Relaciones Exteriores y de Seguridad de la Unión Europea (UE), Federica Mogherini, y la presidenta de la Asamblea General de la ONU, María Fernanda Espinosa, abordaron ayer la crisis venezolana en un encuentro en Bruselas. Ambas discutieron sobre las acciones “concretas” que promueve el grupo de contacto internacional auspiciado por la UE para tratar de facilitar una salida pacífica, política y democrática, la única posible, según declaró el servicio diplomático europeo en un comunicado.
También se expresó sobre el retorno de Guaidó a Venezuela su principal aliado externo, el gobierno de Estados Unidos encabezado por Donald Trump. En un comunicado firmado por el secretario de Estado, Mike Pompeo, declaró que “Estados Unidos celebra al pueblo de Venezuela por sus acciones para crear una transición democrática pacífica y felicita al presidente interino Juan Guaidó por sus exitosos esfuerzos diplomáticos en la región”.