(Es 7 de junio. Faltan 23 días para las elecciones internas y 142 para las nacionales)

Buenos días. Les comento algunas noticias de la campaña electoral que pueden leer hoy en la diaria.

Quedan poco más de tres semanas para las internas, y los precandidatos deben decidir si corren el riesgo de modificar sus planes de campaña, en busca de mejores resultados. Este tipo de decisión siempre ha sido difícil, y ahora se agrega el problema, nada menor, de que las empresas encuestadoras están en pleno proceso de ajuste de sus métodos, y no sabemos cuál está más cerca de lograr una muestra representativa de quienes van a votar el 30 de este mes.

Según la consultora Grupo Radar, en el Partido Nacional sigue primero, pero en descenso, Luis Lacalle Pou, con Juan Sartori creciendo y acercándosele; mientras que Ernesto Talvi está por encima de Julio María Sanguinetti en el Partido Colorado, por segunda medición consecutiva de esa encuestadora (las demás han registrado a Sanguinetti primero o a ambos muy cerca). En el Frente Amplio (FA), Radar coincide con todas las demás encuestadoras en que Daniel Martínez sigue bastante adelante de Carolina Cosse.

Este sondeo aumenta la incertidumbre, no sólo con miras a los resultados de junio, sino también en relación con las perspectivas para las nacionales de octubre. Es obvio, por ejemplo, que si Sanguinetti y Lacalle Pou fueran candidatos, se plantearía un tipo de polarización entre opositores y oficialistas muy distinto del que podría producirse si ganan las internas Talvi y Sartori.

En este marco, pueden mover la aguja tanto un acierto propio como un traspié bien aprovechado por los rivales, y todos meditan mucho (ahora que todavía pueden) sus movimientos.

Lacalle Pou ya tenía de qué preocuparse con el asedio de Sartori, y a eso se le agregó la imprudencia de Pablo Bartol, que no tenía necesidad alguna de decir –en televisión, para peor– que un funcionario del Ministerio de Desarrollo Social (Mides) le había revelado su contraseña de acceso a la red interna en internet de ese organismo. Este tipo de problema se asocia con el énfasis de Lacalle Pou en la presentación de asesores y eventuales ministros relativamente jóvenes y sin experiencia política previa, que dan una imagen de renovación y modernidad pero no son necesariamente diestros para manejar situaciones de alta exposición en los medios.

La titular del Mides, Marina Arismendi, se reunió con el fiscal de Corte, Jorge Díaz, para ponerlo formalmente en conocimiento de los dichos de Bartol, a fin de que decida si corresponde iniciar un proceso judicial. En el sector de Lacalle Pou se apuesta a no seguir hablando del asunto (la misma línea que decidieron aplicar con Sartori), y está por verse si con eso bastará para que otros acontecimientos hagan olvidar este.

Quienes sí lograron bajarle el perfil a un traspié, por lo menos transitoriamente, fueron el presidente Tabaré Vázquez y su secretario Miguel Ángel Toma. Recién ayer se supo, por una publicación del semanario Búsqueda, que la semana pasada declararon ante la Justicia sobre el trámite del expediente del Tribunal de Honor del Ejército que juzgó las conductas de José Gavazzo, Luis Maurente y Jorge Silveira.

Hasta el lunes.