Largometrajes y cortometrajes de todas partes del mundo se exhibirán este mes en el Centro Cultural de España (CCE) para concientizar sobre el cuidado de nuestro entorno. El ciclo incluye películas que fueron programados en el Festival Internacional de Cine del Medio Ambiente de Barcelona –FICMA, uno de los primeros que se dedicaron a la temática en España– que este año cumple 25 años.

Las proyecciones serán todos los lunes del mes, a lo que se suma una edición especial hoy que apunta a la familia. Es el tercer año que se lleva a cabo un Festival de Cine y Medio Ambiente en el CCE. Sin embargo, esta es la primera edición en la que se asociaron con FICMA, y exhibirán una muestra que va a itinerar por todo el continente, presentándose en otros CCE de México, Nicaragua, Costa Rica, República Dominicana, Chile y Argentina.

La selección se decidió entre la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo y el festival. “Intentamos abarcar, dentro de la temática medioambiental el mayor número de focos posibles: desperdicios, alimentos y soberanía alimentaria; plásticos, contaminación y residuos; activismo; derechos de la naturaleza; y una sección infantil”, contó Sheila Pérez, asesora de gestión cultural en el CCE.

Este sábado la propuesta será familiar y gratuita, con películas aptas para todo público. El material pertenece a la 25a edición del FICMA y asume su premisa de “entretener educando y concientizar sensibilizando”. Incluye ocho cortometrajes que en total duran cerca de una hora, con historias que van desde niños que intentan salvar al mundo de máquinas contaminantes hasta realidades alternativas en las que los animales se organizan para hacerse escuchar.

“Intentamos que todas nuestras líneas de trabajo tengan actividades dirigidas a público infantil, juvenil y familiar. La concientización tiene que hacerse en toda la sociedad, sin apartar a los sectores más jóvenes, que van a heredar las consecuencias de nuestros actos y decisiones”, señala Pérez.

Hoy se podrán ver animaciones, ficciones y documentales realizados en España, México, Irlanda y Argentina. Entre ellos, Pérez destaca La ballena franca, documental argentino que apuesta a la poesía visual sumergiéndose en el corazón del Mar Patagónico: “Tiene una fotografía fascinante, y ha recorrido los festivales de cine y medioambiente más importantes de la región”.

La proyección comienza a las 15.00 y el acceso será hasta completar aforo. A partir de las 14.15 se repartirán números, con los que se podrá ingresar cuando abra la sala, unos diez minutos antes del comienzo de la función. Pérez adelantó que los próximos sábados habrá otras propuestas vinculadas al cuidado medioambiental, como talleres sobre frutos nativos o para aprender a construir nidos para insectos polinizadores de las huertas.

Ya destinadas a un público general, todos los lunes de junio a las 19.30 habrá más proyecciones con entrada libre. La selección incluye películas internacionales que abordan los principales retos ambientales que enfrenta la humanidad. Cada fecha exhibirá un largometraje documental sobre el tema, precedido por un cortometraje.

El CCE también organizó otras actividades vinculadas a la temática para este mes, desde charlas hasta visitas para escolares, y en el café se exhibirán cinco cortometrajes sobre los plásticos de un solo uso. Además, a partir de junio se declaró en alerta climática, por lo que desarrolló una agenda en la que el compromiso con el medioambiente es protagonista y ha tomado varias medidas para reducir su huella ecológica.

Ghost Fleet: esclavos de la pesca

Con varios premios internacionales y exhibida por primera vez en el Festival Internacional de Cine de Toronto, la película dirigida por Shannon Service y Jeffrey Waldron llega hoy a nuestro país presentada por la organización Oceanosanos. La función será a las 16.00 en Cinemateca (Bartolomé Mitre 1236). Se trata de una exhibición especial, ya que hoy se conmemora el Día Mundial de los Océanos; el film estará luego en cartel entre el 13 y el 19 de junio.

Ghost Fleet: esclavos de la pesca narra en 90 minutos la historia de algunos pescadores del sudeste asiático que pudieron escapar de la esclavitud. En países como Indonesia, Camboya, Bangladesh y Myanmar, grupos organizados de tráfico de personas engañan a hombres con promesas de empleos bien remunerados en Tailandia. Luego, los trabajadores son vendidos a barcos pesqueros por un bajo precio y retenidos en altamar, donde pueden pasar décadas sin contacto con la tierra.

Patima Tungpuchayakul, nominada al premio Nobel de la Paz en 2017, recorre junto a su fundación las islas de la región, buscando a los pescadores que vivieron esta realidad para conocer su testimonio.

Según Rodrigo García, coordinador de Oceanosanos, la idea de estrenar el film a nivel local “nació de una necesidad de la organización de mostrar la problemática de los derechos humanos a bordo de los barcos pesqueros extranjeros”. García afirma que muchos buques en esta situación arriban al puerto de Montevideo, por lo que considera clave que en Uruguay se conozca esta realidad y se tome una postura.

La propuesta de estrenar el documental en nuestro país nació de los vínculos que Oceanosanos mantiene con otras organizaciones mundiales, y decidieron acercarse a Cinemateca Uruguaya teniendo en cuenta su perfil vinculado a un cine con narrativas similares y un público interesado en este tipo de contenidos.

Si bien la organización se ocupa de la salvaguarda de las pesquerías y la biodiversidad marina, García asegura que el tema del abuso de derechos humanos en el mar está asociado directamente con la pesca ilegal que destruye nuestros ecosistemas: “Es por eso que para el Día Mundial de los Océanos elegimos un documental de esa significación, bastante duro, para mostrar cómo de esa misma manera se están destrozando también las pesquerías del planeta”.

La entrada para ver Ghost Fleet hoy a las 16.00 cuesta $ 50 para socios de Cinemateca Uruguaya y $ 220 para no socios. Hay 2x1 con tarjeta BROU y Antel.