En pleno camino hacia las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) que se llevarán a cabo en agosto, paso previo a las presidenciales de octubre, en Argentina siguen sucediéndose comicios provinciales y prácticamente de todos ellos surge un dato inequívoco: el peronismo se encamina a volver a gobernar, al tiempo que el espacio oficialista del presidente Mauricio Macri continúa acumulando reveses.

En las elecciones realizadas el domingo, el Partido Justicialista (PJ) se posicionó nuevamente como la fuerza ganadora en las provincias de Formosa, San Luis, Santa Fe y Tierra del Fuego.

Los casos de Formosa y San Luis brindaron resultados similares a los obtenidos hasta ahora en las elecciones provinciales anteriores. Allí ganaron la reelección los gobernadores peronistas: Gildo Insfrán en Formosa y Alberto Rodríguez Saá en San Luis. Con 71% de los votos, Insfrán se convierte en el único gobernador argentino en mantenerse en el poder de forma continua desde 1995, mientras que Alberto Rodríguez Saá venció a su hermano Adolfo –quien fue presidente argentino interino entre el 23 y el 30 de diciembre de 2001 y actualmente es senador– con un respaldo de 42%.

Las de Santa Fe y Tierra del Fuego fueron las primeras de las 14 elecciones que se hicieron en lo que va del año en las que el oficialismo local perdió.

En Santa Fe, el gobierno era del Frente Progresista Cívico y Social, una alianza exclusiva de esa provincia en la que están reunidos varios partidos de centro y de izquierda, como la Unión Cívica Radical, la Generación para un Encuentro Nacional de la ex diputada Margarita Stolbizer y el partido Libres del Sur. Este frente, que tuvo como su candidato a Antonio Bonfatti, del Partido Socialista, que preside la Cámara de Diputados local, obtuvo 37% de los votos, pero fue superado por el senador peronista Omar Perotti, del Frente Juntos, que ganó la gobernación con 40%. De esta manera, el PJ volverá a ser gobierno en Santa Fe luego de 12 años de gobiernos del Frente Progresista.

Perotti ha evitado hasta ahora posicionarse en las elecciones nacionales, pero la victoria del Frente Juntos fue aprovechada por algunos para ser presentada como una antesala de las elecciones nacionales, en las que el Frente de Todos, que lleva como fórmula presidencial a Alberto Fernández y Cristina Fernández, es el favorito, de acuerdo a las últimas encuestas. Juntos reunió en Santa Fe varias de las formaciones que se aliaron a nivel nacional con miras a los comicios del 27 de octubre, entre ellas el PJ y el Frente Renovador de Sergio Massa.

En Tierra del Fuego también ganó la oposición, pero en este caso en un enfrentamiento entre peronistas. La gobernadora Rosana Bertone, del PJ, buscaba la reelección, pero perdió ante el intendente de Río Grande, Gustavo Melella, de Concertación Forja, formada por los kirchneristas Frente para la Victoria y Unidad Ciudadana. Melella logró 51% de los votos, frente al 38% de Bertone.

La contienda entre lo que se conoce como el “peronismo K” y el “peronismo moderado” no evitó que ambos candidatos cerraran la jornada electoral manifestando su respaldo a la fórmula Fernández-Fernández. El resultado de estas elecciones también fue leído en clave nacional y algunos dirigentes lamentaron que se mantuviera en la provincia una división que a nivel nacional parece estar reconfigurándose.

Las victorias del domingo posicionan a los cuatro dirigentes provinciales como apoyos importantes para unos y otros peronistas con miras a las elecciones nacionales. De ellos, Insfrán y Melella ya han manifestado su respaldo a la fórmula Fernández-Fernández. En cambio, por parte de Rodríguez Saá no hay un posicionamiento claro. El caudillo local puntano siempre ha sido un independiente dentro del peronismo; sin embargo, ha sido muy crítico con el gobierno de Macri y, según medios argentinos, tiene afinidad ideológica con Alberto Fernández.

El centro de todas las miradas durante el domingo y el lunes fue Perotti. El futuro gobernador santafesino evitó, incluso después de la victoria, posicionarse en la interna, aunque sí llamó a la “unidad del peronismo” para “aspirar a un proyecto nacional”. Estas declaraciones fueron leídas por algunos como una negativa a Pichetto, aunque también es conocido el rechazo de Perotti a la ex presidenta Cristina Fernández, pese a que en Santa Fe los principales referentes kirchneristas le brindaron su apoyo.

Mientras tanto, el PJ y el Frente Renovador le siguen dando forma a su alianza, que deberá presentar las listas electorales este sábado, momento en el que deberán definir si presenta una o más candidaturas en las PASO. Felipe Solá ha ocupado un lugar central en estas negociaciones. El ex integrante del Frente Renovador aseguró ayer que Massa está “cerca” de renunciar a la precandidatura presidencial y pasar a encabezar la lista de candidatos a diputados de la provincia de Buenos Aires del Frente de Todos.