El senador del Partido Nacional (PN) Javier García dijo ayer que existe “un gran agujero negro sin control” con relación al programa denominado Guardián, el sistema de intercepción de comunicaciones con el que cuenta el Ministerio de Interior (MI). “Hoy nadie puede afirmar con seguridad que el sistema Guardián no haga intervenciones por fuera de las órdenes judiciales”, dijo García.

El senador se reunió ayer con Eduardo Turell, presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), y este le confirmó que hasta ahora no se hizo ningún informe sobre el funcionamiento del sistema, que debían ser presentados cada tres meses. En diciembre de 2015, según dijo García, el MI, la Fiscalía y la SCJ habían firmaron un protocolo de actuación para interceptaciones legales de comunicaciones, por el que, a partir de mayo de 2017, la Unidad de Apoyo Tecnológico (Unatec) del MI debía remitir un informe a la SCJ con las intervenciones realizadas.

A raíz de un informe del programa Todas las voces, de Canal 4, el 4 de julio la SCJ le remitió una nota al MI pidiendo que cumpliera con lo previsto en el acuerdo. García explicó que además se debía hacer un acuerdo con las empresas telefónicas para que informaran sobre las intervenciones “efectivamente hechas” porque “es la única forma de saber que no hay intervenciones, o espionaje, por fuera de la Justicia”.

Por su parte, Fernando Gil, director de la Unidad de Comunicación del MI, dijo a la diaria que no tenía conocimiento sobre lo planteado por García.