La Dirección Nacional de Migración dio a conocer esta semana las primeras cifras de la temporada turística, correspondientes a diciembre, que muestran un panorama alentador: entre el 20 y el 29 de diciembre ingresaron a Uruguay 260.260 personas, 1,05% más que en el mismo período de 2018, pese al descenso de 12,31% en la cantidad de argentinos. Los brasileños, en cambio, registraron un aumento de 22,29% y se ratifica la tendencia de las temporadas anteriores, con una creciente preferencia de ese mercado por Colonia.

El subsecretario de Turismo, Benjamín Liberoff, observó con optimismo los números publicados por Migraciones, que contradicen los pronósticos de una temporada bastante magra. Si bien estos datos son parciales y no incluyen los últimos dos días del año que terminó, el nivel de ingreso al país, lejos de decrecer, muestra un leve incremento, tal como señaló la unidad dependiente del Ministerio del Interior. “Todos los reportes hablan de una ocupación satisfactoria en todo el país y en algunos casos, excelente. Este es un elemento extremadamente valioso, más porque tiene que ver con la mano de obra de la gente”, evaluó Liberoff en diálogo con la diaria. Por otra parte, destacó que se trata de una temporada que “hasta ahora no tiene cianobacterias”, a diferencia de la anterior.

Si bien la zona con mayor índice de ocupación hasta el momento es la costa este, sobre todo los balnearios de Maldonado y Rocha, las termas y algunas localidades del litoral y centro del país también tienen “buena ocupación”, indicó Liberoff. Asimismo, el jerarca explicó que, tal como sucedió en años anteriores, los niveles de ocupación y alojamiento varían según la categoría de los servicios que brindan. “Las ocupaciones para sectores medios, sobre todo en la época más alta de la temporada en Punta del Este, tienen más dificultad que los de cuatro y cinco estrellas, que prácticamente han funcionado al 100%”, afirmó.

Las inspectorías que registraron mayores ingresos en el período mencionado fueron Paysandú (47.891), Carrasco (29.753), Salto (29.237) y Chuy (19.036). El ranking por nacionalidad indica que se registra un descenso de los turistas argentinos, que pasaron de 130.105 en 2018 a 114.091 en 2019, mientras que los brasileños que ingresaron al país pasaron de 33.859 en 2018 a 41.405 este año. Les siguen los uruguayos residentes en el exterior, que fueron 18,07% más que en 2018 (65.884 a 77.792), paraguayos, con un incremento de 11,59% (3.677 en 2018 y 4.103 en 2019), y estadounidenses, cuyo número creció 5,67% (5.278 a 5.577). Asimismo, se registró un descenso de otras nacionalidades de 7,78% (18.750 en 2018 y 17.292 en 2019).

Luego de la entrada en vigencia del denominado “dólar turista” en Argentina, un gravamen de 30% para la compra de divisas incluido en la ley de emergencia de Solidaridad Social y Reactivación Productiva que promovió el presidente Alberto Fernández, la Cámara Uruguaya de Turismo (Camtur) y otros actores del sector manifestaron preocupación acerca de su impacto en la temporada actual. El jueves, autoridades de Camtur se reunieron con el ministro de Turismo argentino, Matías Lammens, a quien le plantearon “la baja de la tasa del impuesto a aplicar a las agencias de viaje en Argentina y a las plataformas digitales, así como la implementación de un tope monetario para consumos turísticos en Uruguay exonerados del impuesto”. Según informó Camtur en su sitio web, Lammens “se mostró receptivo y quedó abierto a instancias de diálogo constructivo para ambos países”.

Este año, nuevamente, se están otorgando beneficios fiscales a los turistas extranjeros. Estarán vigentes hasta el 30 de abril, según informó el Ministerio de Turismo. Esto incluye la devolución de la totalidad del IVA sobre servicios turísticos (gastronómicos y arrendamiento de vehículos e inmuebles) pagos con tarjetas de débito o crédito emitidas en el exterior. En el caso del arrendamiento de inmuebles con destino turístico se devuelve 10,5% y no se cobra IVA en hoteles. Asimismo, rige una reducción de 24% del precio de las naftas en las estaciones de servicio ubicadas a un máximo de 20 kilómetros de los pasos de frontera. Por otra parte, desde el sector privado se está impulsando la adquisición de tarjetas prepagas que no están asociadas a una cuenta bancaria y que en el caso del turista argentino sirven para evitar el impuesto que rige desde el 26 de diciembre.