El autor toma la historia de un legendario personaje local, Samuele Stochino, quien luego de haber llegado a sargento en la Primera Guerra Mundial cometió varios asesinatos en su Cerdeña natal, que le valieron el apodo de “el tigre de Ogliastra”. En esta novela el apellido es Stocchino, con una c más, como para tomarse más licencias poéticas que las que la historia permitiría.