El aislamiento político y las tiranteces que está teniendo que afrontar el presidente Jair Bolsonaro, un día sí y otro también, parecen no tener fin en medio de la expansión de la pandemia de coronavirus en el país. Este lunes, durante una conferencia de prensa, el gobernador del estado de San Pablo, João Doria, del Partido de la Social Democracia Brasileña y antiguo aliado del mandatario, volvió a atacarlo por su estrategia de minimizar el impacto de la nueva cepa viral Covid-19, que, de acuerdo a cifras oficiales, en Brasil ya infectó a 4.500 personas y causó 519 fallecimientos.

En su declaración ante los medios, consignada por la revista Fórum, Doria criticó que Bolsonaro haya salido a pasear por las calles de Brasilia el domingo, cuando recorrió algunos mercados y saludó a simpatizantes, mientras están vigentes recomendaciones para mantener el aislamiento social, con el agravante de que el propio presidente es sospechoso de ser portador del virus. Ante esto, el jerarca paulista desautorizó al mandatario y declaró: “En este caso, le pido a la población que no siga las directivas del presidente de la República. Él no está orientando correctamente a la población y, lamentablemente, no está liderando el combate contra el coronavirus en Brasil y en favor de la preservación de la vida”.

Este nuevo embate de Doria contra Bolsonaro se suma al pedido que hizo, también este lunes, un grupo de líderes de la oposición, quienes pidieron la renuncia de Bolsonaro por su política de combate al coronavirus. En el texto hecho público por los políticos, se indica que con su accionar el mandatario agrava la crisis sanitaria, porque “comete crímenes como falsear información, mentir e incentivar el caos”. Además, se acusa al presidente de ser “un presidente irresponsable”, que está empeorando la crisis causada por la pandemia del coronavirus, porque “comete crímenes como falsear información, mentir e incentivar el caos”. “Debería renunciar”, se afirma en el texto que fue consignado por el diario Folha de São Paulo.

El documento está firmado por los ex candidatos presidenciales Fernando Haddad (Partido de los Trabajadores, PT), Ciro Gomes (Partido Democrático Laborista, PDT, por sus siglas en portugués) y Guilherme Boulos (Partido Socialismo y Libertad, Psol) y también por Manuela Dávila, del Partido Comunista de Brasil (PCdoB). Otros políticos que también se adhirieron al llamado de renuncia del mandatario ultraderechista son el gobernador del estado de Maranhão, el comunista Flávio Dino, el gobernador del estado de Paraná, Roberto Requião, del Movimiento Democrático Brasileño, y el ex gobernador gaúcho Tarso Genro.

En el documento se afirma que “Jair Bolsonaro es el mayor obstáculo para la toma de decisiones urgentes que permitan reducir la evolución del contagio, salvar vidas y garantizar los sueldos de las familias y el trabajo que dan las empresas. Atenta contra la salud pública, sin considerar determinaciones técnicas y las experiencias que vienen siendo implementadas en otros países”.

Paralelamente, además de hacer pública esta carta, siete partidos de la oposición entienden que la situación de Bolsonaro debe ser llevada ante la Justicia, para poder efectivizar su salida del gobierno. El PT, el PDT, el PSOL, el PCdoB, el Partido Socialista Brasileño, el Partido Comunista Brasileño y el partido ecologista Rede, a raíz de una idea planteada por el ex ministro de Justicia Eugênio Aragão, evalúan poner el tema a consideración, primero en el Congreso y después ante el Supremo Tribunal Federal, la instancia más alta de la Justicia brasileña. En caso de ser aprobada, la denuncia podría generar la salida del poder de Bolsonaro por 180 días, mientras se evalúa la situación. De todas maneras, esta idea se encuentra en una fase temprana y está comenzando a ser estudiada en profundidad por los departamentos jurídicos de los partidos denunciantes.

Además de soportar ataques desde afuera, Bolsonaro se encuentra cada vez más cercado en su círculo próximo. Son elocuentes las palabras que el mandatario dirigió este lunes a su ministro de Justicia y Seguridad Pública, el ex juez Sérgio Moro. De acuerdo a una nota publicada por Folha, Bolsonaro le habría dicho a un grupo de personas de su confianza que Moro es una persona “egoísta”, al no estar defendiendo sus posiciones en defensa de la suspensión de las medidas de aislamiento impuestas por los gobiernos estaduales. De acuerdo a la publicación, Bolsonaro afirmó a sus interlocutores estarse sintiendo “desamparado jurídicamente” y que Moro “no está haciendo nada” para hacer valer la posición del Ejecutivo por sobre la de los gobernadores. En una suerte de respuesta, aunque sin aludir a las declaraciones del mandatario, Moro publicó en su cuenta de Twitter que “la prudencia en este momento es fundamental”.