Cultura
El blues rural de los desesperados
Así como en Carlota podrida (2009) o Las arañas de Marte (2012) sobrevivía la ruina de un circo que apenas se sostenía en pie, y que había sido despojado y malherido por las enfermedades venéreas, los temporales, los adulterios, el cine y la televisión, en Todo termina aquí nos encontramos ante un tembladeral donde a los personajes no les queda otra que naufragar entre las ruinas, como obedeciendo a un designio desconocido, sin que ningún futuro les ofrezca los ecos tranquilizadores de lo cotidiano, de las rutinas aprendidas.