Las pancartas con consignas como “Ni una menos” o “Vivas nos queremos” invadieron el fin de semana las calles de decenas de países en donde miles de mujeres participaron en una nueva conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. En América Latina hubo movilizaciones en la mayoría de las capitales. Es en esta región donde se registran los mayores índices de violencia de género: según el último informe al respecto de la Organización de las Naciones Unidas, en promedio, 12 latinoamericanas son asesinadas a diario por el hecho de ser mujeres.
Dentro de la región, el país más peligroso para las mujeres es El Salvador, que sólo en 2017 registró una tasa de 12 femicidios cada 100.000 habitantes. Colectivos feministas y otras organizaciones sociales de ese país convocaron a una vigilia el sábado de noche para exigir justicia para las mujeres víctimas de violencia de género y llamaron al Estado a asumir un papel más “activo” para combatirla. Concentradas en torno al Monumento a la Constitución, en San Salvador, las activistas también pidieron a la Justicia que excarcele a las mujeres que tuvieron “complicaciones obstétricas” y fueron acusadas de abortar, una práctica que está penalizada en ese país.
Del otro lado del mar Caribe, en la capital de República Dominicana cientos de personas marcharon ayer bajo la consigna “Ni una menos”. Al frente de la movilización iba un coche fúnebre con dos pancartas en las que se leía: “Las niñas no se matan” y “Ni un entierro más”. Una vez que llegaron al Congreso, las manifestantes –lideradas por la Coalición por la vida y los derechos de las mujeres- exigieron al gobierno la despenalización del aborto en determinadas situaciones, la aprobación de una ley integral para frenar la violencia contra las mujeres y una estrategia para la erradicación del matrimonio infantil.
De acuerdo con cifras ofrecidas el miércoles por el procurador general dominicano, Jean Alain Rodríguez, los femicidios se redujeron 18% en República Dominicana en el último año gracias a la implementación del Plan Nacional contra la Violencia de Género. Sin embargo, la cifra todavía es alta: entre noviembre de 2017 y octubre de este año fueron asesinadas 88 mujeres por razones de género.
En Centroamérica, también Guatemala y Costa Rica fueron escenario de protestas. Mujeres guatemaltecas recordaron a las víctimas de femicidios el sábado de noche, en otra vigilia convocada bajo la consigna “Yo sí te creo”. Las presentes encendieron una vela por todas las mujeres que faltan, agrupadas a los pies de un monumento que recuerda a las 41 niñas que el 8 de marzo de 2017 murieron en un incendio en un hogar estatal. Guatemala es uno de los países de América Latina con mayores índices de violencia de género. Según el Instituto Nacional de Ciencias Forenses, en 2017 fueron asesinadas 772 mujeres en ese país. Es decir, más de dos por día. Hasta fines de mayo de este año, murieron otras 314.
Ciudad de México también se vio movilizada ayer, cuando miles de personas marcharon hacia la Procuraduría General de la República para, entre otras cosas, denunciar ante la Justicia el hecho de que 90% de los casos de femicidio está sin resolverse. El Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio de México registró cerca de 3.000 casos en 2017 y estima que este año terminará con un número similar.
En Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia el foco también estuvo puesto en los femicidios, la forma más extrema de violencia de género. Las movilizaciones más importantes en las calles bolivianas tuvieron lugar en Santa Cruz, la ciudad que más casos ha reportado este año. Los datos de la Fiscalía boliviana revelan que, sólo en el primer semestre del año, hubo 76 femicidios en Bolivia, de los cuales alrededor de 20 se cometieron en Santa Cruz.
Por su parte, los colectivos de mujeres en Argentina convocaron el fin de semana a actividades en distintos puntos del país. En la tarde de hoy, una marcha recorrerá Buenos Aires desde el Congreso hasta Plaza de Mayo bajo la consigna “¡Nos queremos vivas y libres! No al G20. No al ajuste de Mauricio Macri y los gobernadores”. La movilización terminará con un “pañuelazo” verde para reclamar la legalización del aborto, que este año se discutió por primera vez en el Congreso argentino.
En el resto del mundo también hubo manifestaciones contra la violencia de género. Una de las más masivas fue la que se llevó a cabo el sábado en distintas ciudades de Francia, que concentró a 20.000 personas, según la Policía, o a 80.000, según las organizadoras. Fue “la movilización más grande que hubo en Francia contra la violencia sexista”, aseguró el movimiento feminista de ese país.
En tanto, una protesta celebrada ayer contra la violencia machista en Turquía terminó, precisamente, de forma violenta, cuando la Policía lanzó gases lacrimógenos para dispersar a miles de mujeres que, entre otras cosas, gritaban en las calles: “No tenemos miedo”.
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