La Comisión de Educación y Cultura de Diputados envió al plenario de la cámara el proyecto de ley para crear una universidad tecnológica en el interior del país. La iniciativa precisa mayoría especial para su aprobación. En comisión no hubo acuerdo entre el oficialismo y la oposición respecto de la conformación del órgano de gobierno de la nueva institución, denominado Consejo Directivo Central; la oposición entiende que los gremios no deben estar representados y el Frente Amplio pretende una estructura de cogobierno, similar a la que hoy tiene la Universidad de la República, con presencia de representantes de estudiantes y docentes, además de trabajadores, empresarios y dos jerarcas designados por el Poder Ejecutivo. Por el momento no se alcanzó la mayoría especial requerida, y por lo tanto se someterán a consideración del plenario, el 6 de noviembre, dos informes -uno del oficialismo y otro de la oposición- sobre la conformación de la universidad, informó a la diaria el diputado frenteamplista Roque Arregui. Si no se modifican las posturas, ambas propuestas naufragarán.
El nuevo director general de UTU, Eduardo Davyt, que asumió ayer, opinó que no es necesario crear una nueva institución. Davyt dijo a la diaria que habría que “unir esfuerzos y hacer una única institución tecnológica con todo lo que ya tenemos”. Valoró que la solución “más rápida y eficiente” para ello sería darle mayores potestades a la UTU para que alcance estatus universitario.
En cambio, el presidente del Codicen, Wilson Netto, consideró que la creación de una nueva institución no es “excluyente” respecto de la existencia de la UTU. “Pueden crearse N instituciones, eso no quiere decir que la UTU no pueda seguir avanzando”, evaluó.
Cinco campus
Davyt y la profesora Rita Ferrari asumieron ayer como director general y consejera de UTU, respectivamente. Cubrieron de este modo las vacantes generadas luego de la designación de Netto y Javier Landoni al frente del Codicen.
En su discurso de asunción, Davyt celebró que exista una “mejora de la valoración que la sociedad hace de la UTU”, que ya no se vea como “una opción que los jóvenes hacen por descarte”, sino que esté “en los primeros planos”. Afirmó que se propone universalizar la educación media como objetivo de mediano plazo y generar carreras terciarias cortas y localizadas en función de las necesidades de cada región. Aseguró que a tales efectos trabajará junto con la Universidad de la República, a la que calificó como una “compañera de ruta en este proceso”.
Davyt anunció que se propone crear a partir de marzo de 2013 cinco campus regionales en el interior del país. Éstos tendrán la potestad de armar su propia oferta educativa, “con grados crecientes de autonomía en la toma de decisiones, no solamente en lo pedagógico sino en la gestión”, señaló el nuevo director. Uno de los campus abarcará los departamentos de Artigas, Salto y Paysandú y la sede estará en Paysandú; el segundo corresponderá a Rivera, Tacuarembó y Cerro Largo, con sede en Rivera; el tercero a Durazno, Flores, Florida y San José, con sede en Durazno; el cuarto a Treinta y Tres, Lavalleja, Maldonado y Rocha, con sede en Maldonado; y el quinto a Río Negro, Soriano y Colonia, para el que aún no está definida la sede.