El presidente José Mujica, acompañado por varios integrantes de su gabinete, concurrió ayer de mañana a un desayuno de trabajo en la sede del PIT-CNT, donde vertió algunas consideraciones sobre el concepto de “industrialización” que tiene la central, de la coyuntura económica, del cooperativismo y del Frigorífico Nacional.

Ante una sala llena de sindicalistas, Mujica dio un discurso de más de una hora, en el que comenzó definiendo como “progresistas” a los dos gobiernos del Frente Amplio (FA), en la medida en que hacen el “intento de mitigar las injusticias del capitalismo”. Según dijo, lo que han hecho los gobiernos en estos ocho años “no es poco”. “No estamos en un mundo perfecto, pero tenemos un acumulado que hay que defender”, sostuvo. Sin embargo, aclaró que para construir una “sociedad mejor” hace falta “mucho más que acumulación”, ya que este cambio será imposible “con la masiva ignorancia popular que todavía existe en el seno de nuestros pueblos”.

Una vez más, el presidente volvió a hacer referencia al consumismo como la etapa actual del capitalismo, que “está gobernando las masas en todo el mundo”, de la que no se puede escapar “salvo por el conocimiento y la cultura”. Se trata de una etapa de “despilfarro, de use y tire, que termina tirando la vida humana”, opinó.

Autogestión o Frigonal

“Hemos puesto el énfasis en la autogestión porque algún día los trabajadores tendrán que administrar sociedades”, expresó el presidente, que dijo que en Pluna “hasta ahora todo capitalista que agarró fue un desastre”: “Hagamos una cosa nacional, juguemos fuerte y aprendamos”, dijo, y recordó a los “empresarios que dejaron agujeros en el Banco República”.

El mandatario dejó en claro su postura contraria al Frigorífico Nacional (Frigonal), una reivindicación constante del PIT-CNT: “A cualquiera que venga y nos pida una ayuda para industria recuperada, de autogestión, le vamos a dar una mano, pero al que se meta en el negocio del frigorífico no le vamos a dar bola porque lo estaríamos mandando al fracaso”. Luego profundizó sobre su experiencia como ministro de Ganadería: “La cosa más difícil que hay en este país es enfrentar la rosca ganadera. ¿Te creés que porque ponés un frigorífico ganadero te van a vender vacas? Si no estás dentro de la rosca no te venden un carajo. Y además la rosca se reparte la matanza”.

Hizo referencia a varios documentos de la central y consideró que en ellos “persiste un lenguaje con una visión que no está equivocada, pero que no está sutilizada”. “Es demasiado de la época de la industrialización pesada”, describió el presidente, que entendió que actualmente industrializar “es generar más valor en menos tiempo”. “A veces veo que los compañeros entienden que el mundo tiene que estar tapado de chimeneas”, bromeó, para luego dar su postura, ilustrándola con un ejemplo de Nueva Zelanda, país de producción similar a la de Uruguay: “Como producen mucha leche necesitan mucho pasto y tienen una fertilización de nitrógeno brutal, que lo venden al mundo y te cobran 100 dólares por hectárea. La cuestión es la cantidad del valor agregado e inteligencia que hay en el producto”, subrayó.

La internacional

Mujica destacó que por la crisis mundial el comercio con Europa se redujo 25% en los últimos años. No obstante, en términos de recursos, esas pérdidas se “recuperaron” con un aumento del comercio en América Latina, y destacó entre otros países a Venezuela, Chile y Perú.

De China destacó que es el segundo socio comercial de Uruguay y que el año que viene se convertirá en el primero. El mandatario dijo que China “nos abarató el consumo de pila de baratijas y ahora consumimos a lo loco”. Para el presidente, “el factor chino va a seguir tirando y con fuerza, sobre todo para los que producimos alimentos”.

En cuanto a la región, citó al Fondo Monetario Internacional, que estimó que Argentina va a crecer 2,52% este año y el que viene 3,05%. Según dijo, Argentina es el país mas gravitante en la economía uruguaya, porque “le vendemos valor agregado”, servicios como el turismo y “el aporte de la inversión inmobiliaria que sacude a toda la construcción”. El mandatario dijo que “lidiar con las dificultades que presenta la Argentina es uno de los problemas más difíciles y penosos de este gobierno”, pero no hay otra alternativa: “Es lo que hay, valor”.

Además, enfatizó que quienes lo critican por priorizar el Mercosur “plantean que tenemos que abrirnos con el mundo, pero no creo que el mundo se abra con nadie”. “Ningún gobierno ha tenido tantos mercaditos por aquí y allá como nosotros, que hemos logrado incluso vender vino en África”, destacó.

Insistió en que es necesario agrandar el Mercosur “todo lo que se pueda”. Definió como “decisiva” la presencia de Venezuela y dijo, en referencia a Hugo Chávez, que es un “poeta” en el gobierno: “Nunca vi en ningún Estado semejante generosidad; digan lo que quieran de Chávez, pero es de los que ponen el huevo cuando la gente precisa”. Luego fundamentó la inclusión de Uruguay en la Alianza para el Pacífico -“por más que se enoje Brasil”-, “porque los gobiernos cambian y las coyunturas cambian, y si nos 
desentendemos porque no nos gusta la pinta o tienen acuerdo con Estados Unidos, más fácil es para Estados Unidos, así que por lo menos tenemos que estar para romper los quinotos”. Aseguró que “donde se levante cualquier cosa de integración en América Latina, mientras seamos gobierno vamos a estar”.

Realidad nacional

Mujica anunció que “las empresas del Estado van a gastar e invertir como nunca en el país”. “Hace rato que podíamos orejear que podía haber tendencia al enlentecimiento de la economía, y llega la hora en que las empresas públicas, recurriendo a las necesidades de la nación, hagan inversión positiva que ayude al futuro del país”, afirmó. Habló del plan de “cableado” que está haciendo Antel por la conexión a internet”. “Si hubiéramos perdido aquel plebiscito ibas a cablear, sí”, ironizó el presidente, en referencia al referéndum de 1992, en defensa de las empresas públicas. Luego anunció que parte del dinero que sale de Antel será destinado “en una parte importante” a la reforma del ferrocarril.

Admitió que aspiraba a transformar la UTU en un ente autónomo, porque no tenía fe en que se votara la Universidad Tecnológica radicada en el interior, y aprovechó para disparar que algún día el PIT-CNT tendría que tener su propia universidad: “¿Por qué van a permitir que la sociedad burguesa les elija la currícula?”, se preguntó, ante aplausos del centenar de personas que desayunaban en sus mesas, en un formato parecido a los que organiza la Asociación de Dirigentes de Marketing.