Sobre las cooperativas, el presidente de Cudecoop, Alberto Esteves, reivindicó: “Somos un tercer sector de la economía”, que agrupa cooperativas de vivienda, producción, consumo, y ahorro y crédito. “Detectamos en los últimos cuatro años más de 1.000 cooperativas nuevas”, afirmó el dirigente, en un contexto de expansión del cooperativismo como un fenómeno mundial. Si bien las cooperativas fueron “una solución en momentos de crisis”, en la actualidad están “en un momento de estabilidad económica y siguen creciendo”. La capacitación es clave para el desarrollo de las unidades autogestionarias. “Si no nos preparamos, el agua nos va a pasar por arriba”, aseguró Esteves.

Días pasados, miembros de Cudecoop fueron recibidos por el titular del MTSS, Eduardo Brenta, para solicitar su ingreso a la dirección del Inefop. “Queremos integrarlo [...] Las cooperativas son tan grandes que tenemos necesidad de atender a nuestra gente”, señaló Esteves. La institución imparte cursos, pero por razones económicas se hacen de manera “reducida, no masiva”, por lo que por medio de Inefop cuentan con “material económico para que nuestro sueño logre profesionalizarse”. Asimismo, el lunes, Cudecoop resolvió en asamblea solicitar formalmente la integración de “la comisión tripartita de salarios. Hay empresarios y trabajadores; queremos un espacio”, explicó.

Las cooperativas podrían ser un buen termómetro en el marco de las negociaciones tripartitas. Según el dirigente, en el momento en que se desató el pasado conflicto de los empleados de supermercados y grandes superficies, cuando las cajeras pedían 10.000 pesos de salario, sus colegas de las cooperativas de consumo ya ganaban 16.000 pesos por mes por igual tarea.

Problemas tenemos todos

El presidente de la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU), Washington Burghi, dijo a la diaria que el ingreso de las cooperativas a la dirección del Inefop “no lo vería conveniente en primera instancia”. Según Burghi, “hay que intentar tener un organismo lo más dúctil posible, y eso no se logra aumentando miembros”, argumentó. Heredero de la Junta Nacional de Empleo (Junae), el 
Inefop tiene siete miembros, mientras que la estructura institucional que lo precedió tenía sólo tres, cambio que “no ha mejorado sus expectativas”. La cooperativa, según el representante de los industriales, es una forma “jurídica” que ya está representada en el tripartismo tanto por medio de los sindicatos como de las cámaras.

Por su parte, el asesor letrado de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios (CNCS), Juan Mailhos, declaró a este medio no tener comentarios para hacer sobre el asunto. Si bien “todavía” la gremial no tomó “contacto directo con Cudecoop”, próximamente concretarán una reunión. En tanto, uno de los representantes del PIT-CNT en el directorio de la entidad de capacitación, Ricardo Moreira, explicó a la diaria: “No ha llegado ninguna solicitud formal” sobre el punto. El sindicalista recordó que la ley de 2008 que instauró el Inefop (Nº 18.406) “habilita crear comités honorarios para cooperativas, pequeñas y medianas empresas, y formación 
profesional”.

Recientemente se conoció el estudio sobre “Vacantes, contrataciones y capacitaciones 2011-2012” realizado por el Observatorio de Mercado de Trabajo del MTSS. El informe, desarrollado entre febrero y marzo de este año, contiene más de 400 encuestas a empresas de todo el país que presentaron proyectos de inversión frente a la Comisión de Aplicación de la Ley de Promoción de Inversiones (Comap). El 65% admitió tener la necesidad de capacitar a su personal en 2012. Las empresas prefieren contratar profesionales externos para que dicten los cursos (34%), seguido -casi en igual medida- por el dictado de clases por el mismo personal de la organización (24%) y luego por el envío a los empleados a centros de estudio privados (23%). Muy lejos está la misma alternativa en centros públicos (2%). Sólo 3% de las unidades encuestadas financió cursos mediante el Inefop.

En este contexto, el presidente de la CIU admitió: “Necesitamos que más empresas formulen proyectos para orientar fondos al Inefop”. Aunque la formación se da “en forma continua”, también “se puede capacitar más”. Según Burghi, el Inefop ha sido “muy importante” para las pequeñas y medianas empresas (pymes). Sobre esta afirmación, Mailhos matizó que “no es tan así”, dado que empresas como CUTCSA, así como las cooperativas de transporte, recibieron la financiación del instituto.

Para Moreira: “Son pocas las empresas en las que estamos haciendo capacitación”. Se “requiere un acuerdo” entre trabajadores y empleadores, por lo que, en su “mayoría”, la entidad se enfocó en “trabajadores desocupados o con causa de despido”. En cuatro años de labor, pasaron por sus cursos 15.000 trabajadores. La CNCS comenzará una campaña de difusión entre sus socios “para que conozcan la existencia” del instituto, explicó Mailhos. Añadió que el organismo “no es todo lo ágil o dinámico que podría ser”, por lo que “la empresa busca otra fuente” de financiamiento y “el trabajador, otra oportunidad” de formación. “Hoy sentimos que no damos respuesta en tiempo y forma”, concluyó. A su turno, Moreira reconoció: “Deberíamos haber avanzado mucho más”, en parte porque “allí nadie tiene poder de veto”. “Muchas veces nos llevan horas de discusión los temas administrativos y no dedicamos demasiado tiempo a los estratégicos”, admitió.