La idea de que se creara la Facultad de Información y Comunicación (FIC) tuvo muchas idas y vueltas en los últimos años, desde que se planteó por primera vez durante el rectorado de Rafael Guarga. Cuando asumió Rodrigo Arocena al frente de la Universidad de la República (Udelar) el proyecto pareció diluirse, pero los principales involucrados, la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación (Liccom) y la Escuela Universitaria de Bibliotecología y Ciencias Afines (EUBCA), lograron convertir los reveses en victoria, por lo que ahora se encuentran a un par de resoluciones de que la FIC sea una realidad. Tanto los decanos que integran el Consejo Directivo Central (CDC) de la Udelar como la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay y la Asociación de Docentes de la Udelar ya se expidieron a favor de su creación: la FIC es cuestión de tiempo.

El viernes se dio otro paso significativo en el proceso, que también tuvo marchas y contramarchas: comenzó la construcción de un edificio para la FIC, que a partir de su creación y hasta 2015 deberá funcionar en los servicios base que pasarán a componerla. En 2011, el Plan de Obras de Mediano y Largo Plazo (POMLP) de la Udelar colocó la creación del nuevo edificio en el segundo lugar de sus prioridades, únicamente superado por el traslado de la Facultad de Veterinaria a un predio ubicado en la ruta 8. Una vez tomada la decisión de crear la FIC, y después de licitaciones y otros pasos propios de la administración pública, se colocó la piedra fundamental en el -por ahora- terreno baldío ubicado en la manzana que conforman las calles Gonzalo Ramírez, Juan D Jackson, San Salvador y Eduardo Acevedo, en Montevideo.

El edificio se ubicará justo frente al de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración (FCEA), servicio que actualmente cuenta con cerca de 20.000 estudiantes y que será otro de los grandes beneficiados, ya que utilizará parte del espacio del nuevo centro para el dictado de clases. Es que además de la FIC, una parte será destinada a la construcción de un aulario para toda el Área Social de la Udelar.

Buenas migas

La semana pasada Arocena se reunió con Mujica de cara a la próxima Rendición de Cuentas, instancia en la que el presidente le manifestó que aún no había resoluciones tomadas acerca de la asignación presupuestal, pero de todas formas le adelantó que no habría un incremento de recursos considerable. Además, según dijo Arocena a la diaria, Mujica reconoció que “la Udelar merece mucho más reconocimiento del que ha tenido, por sus esfuerzos de mejora y cambio”. Ya con la sala Maggiolo desocupada, se convocó para mañana una sesión extraordinaria del CDC para analizar el pedido de la Udelar.

El viernes, previo a poner la piedra fundamental y a compartir un chocolate caliente con churros, los principales involucrados y autoridades de gobierno realizaron una presentación de la obra. La arquitecta Inés Llorente, coautora del proyecto junto con Ulises Torrado, expuso los detalles del futuro edificio, que en total tendrá una superficie de casi 13.000 metros cuadrados y cuya construcción costará cerca de 400 millones de pesos. Hizo referencia a dos particularidades con las que cuenta el terreno: por un lado, el portal Ragú (del ex Asilo Larrañaga); por otro, la iglesia Nuestra Señora del Huerto. Ambos han sido declarados Patrimonio Histórico Nacional y, por ende, deben ser respetados.

En su cauce

El director de la EUBCA, Mario Barité, dijo que “el proyecto es algo más que un edificio” y que implica la posibilidad de “analizar, leer, interpretar y reinterpretar”. Barité recordó la frase “navegar es necesario, vivir no es necesario”, que leyó en sus primeros años universitarios, en la década del 70, pero que no pudo entender hasta años después, gracias a la biblioteca de la EUBCA. El director finalmente entendió que la frase, proveniente de un mito griego, quiere decir que una vida sin la posibilidad de la aventura no es vida, y la aplicó a la creación de la FIC. Por su parte, Gabriel Kaplún, el director de la Liccom, recordó las idas y vueltas del proceso y se refirió a que finalmente se pudieron compatibilizar dos culturas institucionales como la de su servicio y la de la EUBCA.

El decano de la FCEA, Rodrigo Arim, habló del proceso de cambio y actualización de planes de estudio que está viviendo la Udelar, con el objetivo de que se reduzca la desvinculación estudiantil, aunque ello también requiere contar con más espacios físicos. En esta línea, uno de los integrantes de la comisión del POMLP, Hugo Martínez, dijo que en el quinquenio 2010-2015 la Udelar aprobó la construcción de 178.000 metros cuadrados. Arocena, quien hizo las veces de maestro de ceremonia, mencionó una reunión que mantuvo la semana pasada con José Mujica, quien se mostró sorprendido por la cantidad de obras, pero principalmente por el traslado de la Facultad de Veterinaria (ver recuadro).

Tanto el director general del Ministerio de Educación y Cultura, Pablo Álvarez, como el subsecretario de Industria, Energía y Minería, Edgardo Ortuño, hicieron referencia a la necesidad del país de contar con una FIC. Mientras que Ortuño centró su fundamento en el proceso de cambios regulatorios y tecnológicos que Uruguay está viviendo en materia de información y comunicación, Álvarez se enfocó en la situación actual del sistema educativo. Criticó al sistema político, que a menudo pide “soluciones inmediatas” para la educación, y señaló que esa urgencia va en contra del sistema. Además cuestionó una “voluntad privatizadora” creciente entre los políticos y cuestionó a los “liceos chárter”, en alusión a aquellas instituciones privadas de educación que se instalan en zonas donde predomina la pobreza. Álvarez señaló que en esos casos “los resultados no son distintos, sino que únicamente se resuelve la ansiedad del sistema político”.