El Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) publicó ayer los informes de la Comisión Honoraria Asesora Independiente (CHAI) y de la Unidad Reguladora de los Servicios de Comunicaciones (Ursec), que entendieron en el llamado a usufructuar canales de televisión digital en el sector comercial.

La CHAI puntuó los proyectos y luego competerá al Poder Ejecutivo, antes del 27 de octubre, determinar las asignaciones. En primer lugar quedó el consorcio Giro (integrado por las cooperativas La Diaria y Demos) con 86,8 puntos (en 100), en segundo lugar Saomil SA (VTV) con 80,23 puntos, en tercero el consorcio Pop TV (integrado por la editorial Bla y la productora Oz Media) con 79,49 puntos, en cuarto lugar el de Federico Fasano con 77,85 puntos, en quinto el de la Compañía Uruguaya de Publicidad (Océano FM) con 72,82 puntos y en sexto el de Sarmelco SA (de accionistas de El País y con convenio con la redacción de ese diario) con 59,8 puntos.

La CHAI destacó la “calidad de los proyectos presentados en general”, y el hecho de que “todos buscan propuestas diferentes a las que actualmente existen en televisión abierta, haciendo una fuerte apuesta a la producción nacional, proponiendo contenidos nacionales que actualmente son prácticamente inexistentes, como la ficción, programas documentales, infantiles y educativos”.

La evaluación mediante puntajes “objetivos” comprendía la inclusión de señales propias, la cuota de producción nacional, la innovación en la programación, la cantidad de empleos directos, el tiempo de emisión de pautas publicitarias, la accesibilidad a los contenidos para personas con discapacidad y los antecedentes de los proponentes como empresarios de la comunicación. Tomando en cuenta la globalidad de estos ítems, el orden fue: Giro, VTV, Fasano, Pop, Océano y Sarmelco.

Luego había un ítem denominado “evaluación global del proyecto”, que representaba 15% del puntaje total y evaluaba aspectos tales como la consistencia y sustentabilidad del modelo de negocios, y el carácter innovador y la calidad de los contenidos propuestos. En este ítem el orden fue: Pop, Giro, Sarmelco, Océano, VTV y Fasano.

La CHAI realizó un listado de fortalezas y debilidades de cada proyecto. Por ejemplo, se evaluó como fortaleza de Pop la grilla, la alta inversión en programación, la cantidad y la calidad de los contenidos orientados al público infantil, la estrategia de internacionalización, y un modelo de gestión “fusible”, capaz de adaptarse a cualquier contingencia económica. Del consorcio Giro se valoró su grilla variada, la alta inversión y el carácter innovador de la programación, una propuesta de servicios conexos “original y novedosa”, y como debilidad, que la plantilla propuesta es muy numerosa, lo que da rigidez a la estructura. Como fortalezas de VTV se señaló que invierte en programación nacional y que su grilla es variada.

En cuanto al proyecto de Fasano, destacó como aspecto positivo la existencia de una grilla variada, y mencionó como debilidad la baja inversión en programación y que los montos previstos para coproducir ficción son “absolutamente insuficientes para asegurar un nivel mínimo de calidad”. En el caso del proyecto de Océano, se menciona como fortaleza los antecedentes del proponente, Pablo Lecueder, y como debilidad que “gran parte de la producción nacional propuesta constituye una programación orientada a lo que hace hoy en radio pasado a formato televisivo”. Finalmente, en el caso de Sarmelco, se mencionan como fortalezas la alta inversión inicial de capital y la alta previsión de capital trabajo, y como debilidades, que la grilla es poco variada y que “si bien utiliza la palabra ‘innovación’ reiteradamente en su propuesta, la única referencia explícita a un perfil innovador” está referida a “la venta de publicidad”.

Los representantes de la Universidad de la República, de la Sociedad Uruguaya de Actores y de la Asociación de Radios del Interior solicitaron al Poder Ejecutivo que considere otorgar más canales, además de los dos previstos. El resto de los integrantes de la CHAI, incluyendo al delegado del MIEM, no suscribieron el pedido.

La Ursec, por su parte, tuvo a su cargo la evaluación de la documentación relativa a los postulantes y el proyecto técnico. Detalló la información presentada por cada postulante y la información faltante, y realizó una evaluación de la concordancia de la capacidad económica con los aspectos técnicos. La Ursec valoró que en el proyecto de Giro “no se muestra razonable concordancia” entre la capacidad económica y el proyecto técnico, si bien agrega que el “análisis se debe completar conjuntamente con la evaluación de la capacidad financiera, dado que las fuentes de financiamiento se encuentran incluidas en la parte 3 del pliego”. En los restantes casos evaluó que existe concordancia entre la capacidad económica y los proyectos técnicos.