“Si una foto dice mil palabras, un video dice millones”, dijo el director del Auditorio Nacional del SODRE, Gerardo Grieco, cuando finalizó el cortometraje documental sobre la escuela rural Grutas del Palacio, que registró el entusiasmo de la previa, el viaje y arribo al Auditorio. Este año, se desarrolló la segunda edición del programa Escuelas rurales al Auditorio, que invitó a más de 1.000 niños de 105 escuelas rurales de todo el país -acompañados por maestros y referentes- a ver la producción Don Quijote, del Ballet Nacional del SODRE (BNS).

En una concurrida convocatoria, la sala Hugo Balzo se colmó de espectadores, medios de prensa, personalidades de la cultura y dirigentes políticos para celebrar la memoria de gestión 2014. Grieco expresó que se ha “llenado de sentido este edificio”: “Transformamos un símbolo de lo que era una obra pública inconclusa en un edificio lleno de contenido”. Entre los primeros reconocimientos, el director sostuvo que con la designación de Julio Bocca como director del BNS, se había marcado un rumbo, y consideró que hoy ese cuerpo artístico se había convertido en uno de “nuestros mayores orgullos”, junto a la Orquesta Juvenil y la Orquesta Sinfónica del SODRE, recuperando “espacios y niveles que hacía tiempo no teníamos”.

Mientras Grieco ofrecía las diferentes evaluaciones, avances y porcentajes, el consejo directivo de la institución y el ministro de Educación y Cultura, Ricardo Ehrlich, lo secundaban, serios, desde sillones negros ubicados en el escenario. El director continuó diciendo que soñaron con dotar esa estructura de excelentes contenidos y presupuestos sostenibles para el país, “convirtiéndolo en un motor de desarrollo cultural, turístico, político y urbanístico”, sin abandonar la apuesta a la eficiencia.

En cuanto a los espectadores, sostuvo que este año se marcó un nuevo récord, ya que asistieron más de 278.000, entre los que se encuentra un número importante -24.000- que corresponde a perspectivas de inclusión social y creación de nuevos públicos. Vinculado con esta política institucional, Grieco recordó la particularidad de que en una función de El mesías, en la platea habían coincidido reclusas de la cárcel de mujeres, jóvenes del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay, estudiantes liceales que accedieron a partir de la Tarjeta Libre, policías que asistieron por un convenio con el Ministerio del interior, y otros ciudadanos y turistas que compraron sus entradas. “Para mí esa función fue inolvidable”, evocó.

Este año, en el que se cumplieron cinco años de la reinauguración del Auditorio -85 desde su creación-, el edificio de Mercedes y Andres llegó a casi 300 funciones en ambas salas. El directivo, que se encuentra al frente de la institución desde hace dos años, estableció como prioritario poner al Auditorio en órbita “con nuestros recursos y nuestros talentos”, al nivel de la calidad mundial. Por su parte, Ehrlich expresó que se encontraba muy impresionado con las imágenes de las escuelas rurales. Dijo que éstas le remitieron a sus seis años, cuando en una vieja sala del Auditorio había visto Cascanueces, algo que lo marcó para el resto de su vida.

De primera mano

Grieco dijo a la diaria que se encontraba “contentísimo”, ya que poner en órbita esa gran nave implicaba un momento muy especial. “Estamos viviendo el mejor momento del BNS y la Orquesta Juvenil, en las diversas expresiones artísticas y en los números. Estamos mejor que nunca en los 85 años del SODRE”. Recordó que tiempo atrás lideró varios equipos, entre los que se encuentran la sala Zitarrosa y el teatro Solís, “y siempre ha sido de una intensidad inimaginable.”

Consultado sobre los debes del auditorio, dijo que ahora se trata de ajustar y de perfeccionar el rumbo, ya que considera que en la gestión y en los contenidos siempre hay mejoras pendientes. “Hay que superar algunos problemas estructurales de las orquestas. En verdad, el concepto para mí es consolidar y desarrollar esto que pusimos en pie”. Adelantó que en los primeros meses del año la programación contará con destacados artistas, entre los que se encuentran Luis Perales, Boulevard tango, el regreso de la compañía Finzi Pasca, Joan Manuel Serrat, Emil Montgomery, Martinho da Vila y Ney Matrogrosso, además de la celebración de los 80 años del BNS (creado en 1935). “El ballet es el símbolo de lo que se puede lograr en calidad y manejo del tiempo con los recursos y el talento propio”. En lo que tiene que ver con este cuerpo estable, su producción de Don Quijote se posicionó como la más exitosa de la historia del BNS -con 20.882 entradas vendidas-, según esta memoria de gestión.

Además, el informe sostiene que el organismo recuperó el significado de la producción teatral, ya que se reinstalaron variados talleres técnicos, entre los que se encuentran disciplinas como la herrería, utilería, pintura de telones y realización de vestuario.