Desde enero, con la irrupción de Podemos, el paisaje político español está conmocionado y en permanente reajuste. Esa nueva organización política logró cinco diputados europeos en mayo y su aceptación popular se reafirma en cada una de sus instancias participativas. En la Asamblea Ciudadana de Podemos participaron más de 107.000 
personas.

En ese proceso resultó electo al frente del partido Pablo Iglesias. Este dirigente y diputado del Parlamento Europeo está en pareja con Sánchez Melero, legisladora de la Asamblea de Madrid por IU. Este partido, que estaba creciendo al amparo del descontento que despertaban los partidos tradicionales -el gobernante y conservador Partido Popular (PP) y el socialdemócrata Partido Socialista Obrero Español (PSOE)-, perdió apoyo con el surgimiento de Podemos.

El partido de Iglesias se niega a ser encasillado como “de izquierda” y prefiere definirse a partir de su forma participativa de funcionar, mientras que IU, fundado en 1986, sí acepta esa etiqueta.

La pérdida de fuerza de IU es visible en Madrid, donde las encuestas le atribuyen el cuarto o el quinto lugar en las elecciones autonómicas y municipales de la Comunidad, previstas para mayo.

En las primarias abiertas que celebró IU-Comunidad de Madrid el domingo, además de Sánchez Melero resultó electo el candidato de su corriente a la alcaldía de la capital, Mauricio Valiente. La cómoda victoria que lograron marcó el desenlace de una tensa campaña, en la que Sánchez Melero fue acusada de haber beneficiado a uno de sus hermanos cuando era concejal de un ayuntamiento. Por otro lado, algunos miembros de IU han sido cuestionados por irregularidades en el caso conocido como Caja Madrid-Bankia.

Además, Sánchez Melero y Valiente fueron acusados de haber inscripto a militantes de Podemos como simpatizantes de Izquierda Unida habilitados para votar. Por ese motivo, el sector mayoritario en todo el país desde el último congreso, de 2012, y su fórmula para Madrid, integrada por José Antonio Moreno y Raquel López, impusieron un sistema de doble urna a días de la votación: por un lado, votaron los adherentes al partido; por otro, los simpatizantes inscriptos para participar en esta elección.

El objetivo de este sistema era controlar que la urna de los simpatizantes no se desbordara de votos para Sánchez Melero. El resultado fue contundente. Sánchez Melero obtuvo más de 56% de los votos: 1.730 de los afiliados y 3.371 de los simpatizantes, y Moreno obtuvo 1.254 votos de los militantes y 1.972 votos de los simpatizantes.

Julián Sánchez Vizcaíno, el tercer candidato a encabezar las listas de diputados autonómicos, propuesto por una corriente escindida del oficialismo, alcanzó 699 votos.

Para ser candidato a la alcaldía de Madrid, Valiente, que es diputado regional al igual que Sánchez Melero, ganó con 58,7% de los votos, 601 de los militantes y 1.274 de los simpatizantes inscriptos, mientras que la oficialista López quedó segunda con 357 apoyos de militantes y 697 de los simpatizantes. La tercera opción, Lali Vaquero, obtuvo 117 votos de militantes y 129 de simpatizantes, según los datos primarios.

Estos resultados fueron interpretados como una voluntad de cambio de línea en IU y como un visto bueno a la voluntad de alianzas que tiene el sector de la pareja de Iglesias, Sánchez Melero. En una extensa entrevista con el diario El País de Madrid, la diputada regional aclaró que no pretende una fusión de Podemos e IU, sino alianzas a partir de líneas programáticas y negociaciones. “No seré la candidata de mi novio”, ratificó.

En ese sentido, es probable que se retome para la alcaldía de Madrid la alianza Ganemos, creada en mayo y prevista para las municipales, en la que participan distintos partidos políticos menores y también Podemos, para intentar recuperar el control del gobierno de la ciudad, que está en manos del PP desde 1995. De acuerdo con la última encuesta publicada, de la firma SigmaDos, IU y Podemos unidos empatan con el PP. Sin embargo, de cara a las autonómicas (incluyendo el gobierno de la Comunidad de Madrid), Podemos parece estar resuelto a presentarse en solitario.

Además, la consecuencia más inmediata de la votación del domingo fue la renuncia de Eddy Sánchez, el secretario general de IU en Madrid. Dijo que su decisión ya estaba tomada antes de las primarias porque considera que cumplió sus objetivos.

En tanto, Podemos continúa con su proceso de organización, y el 2 de enero informará quiénes serán sus secretarios generales en cada municipio, y probablemente después de esas definiciones podrán avanzar las alianzas.