Según el Instituto Nacional de Estadística, 0,3% de los hogares uruguayos se encontraba en situación de indigencia en 2013, un valor similar al observado en 2012. Al considerar como unidad de análisis a las personas, también se mantiene en el nivel observado en 2012: 0,5%. La pobreza, que viene en continuo descenso desde 2006, siguió con esta tendencia en 2013, cuando los hogares por debajo de la línea de pobreza se estimaron en 7,8%, 0,6% menos que en 2012. La proporción de personas por debajo de la línea de pobreza tuvo un descenso aún mayor, de 0,9%, y se ubicó en 11,5%.
La mayor proporción de personas pobres se verifica en Montevideo, en donde el 15,7% de las personas sufren dicha condición. En las localidades urbanas del interior del país la pobreza se estimó en 11,9%, mientras que en el interior rural es de 3%. Independientemente de la zona geográfica, se constató que los niños y adolescentes, así como los hogares con jefatura femenina y la población afrodescendiente, son los grupos más afectados por la pobreza. De cada 1.000 niños menores de seis años, 226 son pobres, mientras que por cada 1.000 personas de entre 18 y 64 años, 92 lo son. Sin embargo, también es entre los niños y adolescentes donde se observó la mayor reducción de la pobreza. En 2006 53,4% de los niños menores de 6 años era pobre, mientras que en 2013 la cifra fue de 22,6%.
Hay varios métodos para medir la pobreza e indigencia en una población; uno de ellos utiliza como indicador el ingreso que perciben las personas. Por eso se lo considera un método indirecto, ya que no puede evaluar efectivamente si las personas viven en condiciones de pobreza o indigencia, sólo si tienen los medios como para no estarlo. Para esto se trazan dos líneas: la de indigencia, que determina el dinero que se necesita para comprar una Canasta Básica de Alimentos (CBA); y la de pobreza, que incluye además de la CBA, una no alimentaria. En Montevideo, la línea de indigencia se ubicó en diciembre de 2013 en 2.304 pesos, en el interior urbano en 2.135 y en el interior rural en 1.926. En tanto, la línea de pobreza se ubicó en la capital en 6.968 pesos, en el interior urbano en 4.041 y en el interior rural en 2.208.