El abogado Juan Fagúndez apeló ayer el procesamiento sin prisión del ex representante de los trabajadores en la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) Alfredo Silva. El funcionario procesado solicitó a su abogado que no divulgara el escrito, y prevé organizar una conferencia de prensa para dar a conocer su postura respecto de lo sucedido en ASSE.

Fagúndez sostuvo que Silva, procesado por conjunción del interés público con el privado, no tuvo “ningún interés que fuera más allá del simple asesoramiento sobre derechos y obligaciones de los trabajadores” de la asociación civil Buena Estrella. “No hubo injerencia de Silva en los órganos que decidían. No puso en ninguna situación de privilegio a las empresas, ni forzó a nadie a que las contratara, ni se metió en el proceso de contratación. Además, como director de ASSE no tenía potestades de hacerlo porque eso lo decide cada hospital, no pasa por ASSE”, señaló Fagúndez a la diaria. Agregó que cuando el juez del crimen organizado Néstor Valetti consultó a los jerarcas de los hospitales si Silva había intervenido en favor de alguna empresa, “dijeron que no”. “[Silva] asesoró sobre información que es pública. Como [los trabajadores de Buena Estrella] eran los ex limpiadores que se juntaban para que el Estado no pagara todas las deudas que dejan los empresarios que se van, se tomó la decisión de juntarlos, asesorarlos en cómo formar la empresa, y listo”, indicó.

Además, insistió en que Silva no estaba al tanto de las maniobras de Heber Tejeira, procesado por cohecho. “La relación de Silva con Tejeira no era fluida, permanente, para que Silva pudiese saber lo que hacía Tejeira”, sostuvo.

En tanto, ayer se reunió la comisión del PIT-CNT que estudia la definición de un protocolo de actuación para el representante de los trabajadores en ASSE. Según informaron fuentes del secretariado de la central obrera, se maneja la posibilidad de que esa persona actúe con un equipo de trabajo. Para financiar ese equipo, el PIT-CNT le fijaría un sueldo al representante en ASSE, y la diferencia entre este sueldo y el que percibe efectivamente el representante “iría a la bolsa para financiar el funcionamiento del equipo”, algo similar a lo que sucede con el representante de los trabajadores en el Banco de Previsión Social.