El fiscal Alberto Nisman explicará el lunes ante el Congreso argentino por qué pidió investigar a la presidenta Cristina Fernández y al canciller Héctor Timerman por el acuerdo firmado con Irán por el caso AMIA. En un escrito los acusa de “negociar un plan de impunidad y encubrir a los prófugos iraníes acusados de la voladura a la mutual judía”, en referencia al atentado que sufrió la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en 1994, en el que murieron 84 personas. Las diputadas Laura Alonso y Patricia Bullrich, integrantes del partido opositor Propuesta Republicana, pidieron que el fiscal diera explicaciones ante la Comisión de Legislación Penal de la Cámara de Diputados.

El fiscal argumenta que basa su acusación en evidencias recabadas mediante escuchas telefónicas sobre las maniobras del gobierno argentino para, según él, “librar de toda sospecha a los imputados iraníes” y “fabricar la inocencia de Irán”. Las diputadas pidieron que esas pruebas puedan ser tomadas en cuenta para someter a juicio político al canciller y pidieron además que el diputado oficialista Andrés Larroque sea desaforado debido a que Nisman lo considera uno de los interlocutores del gobierno para negociar con el gobierno iraní.

Además, el fiscal acusa también al militante kirchnerista Luis D’Elia, al líder de la organización Quebracho Fernando Esteche, a funcionarios de la secretaría de Inteligencia de la Presidencia argentina, al ex fiscal federal y ex juez Héctor Yrimia y al iraní Jorge Yussuf Khalil, representante del gobierno de Irán en Argentina, de haber participado en un “plan criminal llevado adelante” por Fernández y Timerman. El secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, consideró ayer que el pedido del fiscal es “ridículo” y que “la denuncia no tiene asidero”. Además se preguntó por qué Nisman no involucró también a los legisladores que, como él mismo, aprobaron en el Congreso el Memorándum de Entendimiento firmado con Irán, en 2013.