Entre el 3 y el 26 de junio del año que viene se disputará en Estados Unidos la Copa América Centenario, torneo que organizarán conjuntamente la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) y la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf, por su sigla en inglés), en conmemoración de la primera Copa América, realizada en 1916 en Buenos Aires y ganada por la selección uruguaya.

Si bien el evento estaba programado desde hacía dos años, recién en los últimos días se confirmó su realización efectiva, que estuvo en suspenso debido a la trama de corrupción en la que están involucrados altos dirigentes de la Conmebol y la Concacaf.

El hecho de que el evento se vaya a realizar en Estados Unidos, país desde el que se lanzó la investigación en profundidad sobre los casos de corrupción de la FIFA, marcó la cancha a las autoridades del fútbol sudamericano y del resto del continente. Hace una semana se anunció oficialmente que ambas entidades habían rescindido sus respectivos contratos con la empresa Datisa, que era la que tenía los derechos de televisación del torneo, en el que tomarán parte 16 selecciones, diez de la Conmebol y seis de la Concacaf.

Sucede que Datisa (integrada por las empresas Traffic, TyC y Full Play) quedó totalmente patas para arriba luego del pedido de captura realizado en mayo por la Justicia estadounidense, que alcanzó a los principales accionistas de las tres empresas que conforman el conglomerado. En ese momento la realización del torneo pareció peligrar, pero las negociaciones llevadas adelante durante estos últimos meses entre la Conmebol, la Concacaf y los representantes estadounidenses del comité organizador de la Copa América Centenario llegaron a buen puerto, se canceló el contrato con la investigadísima Datisa y, en un hecho inédito, queriendo dotar de cristalinidad al proceso, la Conmebol anunció el martes en su sitio oficial el proceso de licitación para los derechos comerciales del torneo que se celebrará en 2016 en diez ciudades estadounidenses. Así, el año que viene, al igual que éste, habrá Copa América. Además, desde la Conmebol se confirmó que la Copa América de 2019 se jugará en Brasil y la de 2023 tendrá como sede a Ecuador.

Se vienen dos más

También en estos días la Conmebol confirmó los detalles de disputa de las dos próximas fechas de las Eliminatorias para el Mundial de Rusia, la tercera y la cuarta. El jueves 12 de noviembre, la tercera etapa comenzará con el partido que jugarán Bolivia y Venezuela a las 17.00 (hora uruguaya) en el estadio Hernando Siles de La Paz, a las 18.00 Uruguay será visitante ante Ecuador en el estadio Atahualpa de Quito, a las 20.30 Chile recibirá en el Estadio Nacional de Santiago a Colombia y a las 21.00 en el Monumental de Buenos Aires se jugará el duelo entre Argentina y Brasil. Esta fecha se cerrará el viernes 13 con el partido que jugarán a las 23.15 las selecciones de Perú y Paraguay en el Estadio Nacional de Lima.

La cuarta fecha se disputará íntegramente el martes 17. A las 17.30 la etapa se abrirá con el duelo que sostendrán Colombia y Argentina en el Estadio Metropolitano de Barranquilla, Venezuela y Ecuador jugarán a las 18.00 en el Polideportivo Cachamay de la ciudad de Puerto Ordaz, a las 20.00 en el estadio Centenario Uruguay chocará con Chile, a las 21.00 en el Defensores del Chaco de Asunción Paraguay recibirá a Bolivia y a las 22.00 en el estadio Fonte Nova de Salvador la etapa culminará con el partido que jugarán Brasil y Perú.

Con respecto a esta doble fecha de Eliminatorias, ayer se supo que el buen volante derecho ecuatoriano Antonio Valencia no podrá estar a la orden en los dos próximos partidos de su selección, por una lesión en el tendón de su tobillo derecho. De esta manera, el veloz volante que juega desde hace varias temporadas en Manchester United de Inglaterra no podrá enfrentar a la celeste en Quito.