El Ministerio del Interior (MI) presentó las cifras del Observatorio Nacional sobre Violencia y Criminalidad que relevó entre enero y octubre de 2015. Los datos indican que aumentó significativamente la cantidad de denuncias por violencia doméstica: en 2005 se recibieron 5.612, y en lo que va de 2015, 25.549. Es la segunda más realizada después de hurtos: se produce una cada 17 minutos, lo que resulta en un promedio de 85 cada día, 8% más que el año pasado. En los últimos 12 meses, 76,7% de las víctimas de este delito son mujeres y 23,3%, hombres. Según el MI, en los últimos 12 meses hubo 11 tentativas de homicidio por violencia doméstica y fueron asesinadas 23 mujeres: una cada 16 días. Según la organización Mujeres de Negro, fueron 28.

En el anexo del Palacio Legislativo, en un acto organizado por el MI y la Bancada Bicameral Femenina (BBF), donde se presentaron datos en conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, la directora de la División Políticas de Género, July Zabaleta, aseguró que “las estadísticas nos siguen mostrando un aumento de las denuncias, pero es algo positivo por un lado, porque refleja el aumento de la confianza de la sociedad en las instituciones del Estado, en la efectividad de la Policía y la confianza también en denunciar”. Según los datos del MI, entre noviembre de 2014 y octubre de 2015 fueron asesinadas 45 mujeres en el país; 23 por violencia doméstica. El 44,4% de las víctimas fueron asesinadas por sus parejas o ex parejas, en 17,8% de los casos no existía relación entre la víctima y el homicida, 13,3% mantenían una relación de amistad o eran “conocidos” y en 8,9% de los casos el asesino fue un familiar; en 15,6% no se sabe.

La mayoría de las mujeres asesinadas tenía entre 30 y 49 años. 17% había realizado previamente una o más denuncias contra su agresor. En promedio, entre 2011 y 2015 se mató a más mujeres en Rocha, seguido por Treinta y Tres.

Por otro lado, el ministro Eduardo Bonomi aseguró que hay que discutir si aumentar las penas o no, “porque, si aumentar las penas no sirve para nada, ¿para qué planteamos la figura del femicidio como un delito más grave que el homicidio?”. “Capaz que hay que adecuar la discusión a las distintas situaciones y no tener una receta simple, y ante el aumento de la violencia decir que hay que aumentar las penas, o decir que no hay que hacerlo porque no sirve para nada”, indicó. Desde la BBF se destacó la necesidad de continuar perfeccionando la producción legislativa para conseguir mejores resultados. Además, expresaron su “honda preocupación por este flagelo, que requiere la lucha de todas y todos para poder desterrar la violencia en nuestra sociedad”.