Se presentaron ayer los principales datos de la Encuesta Nacional de Salud, Nutrición y Desarrollo Infantil, un trabajo del Instituto Nacional de Estadística (INE), Uruguay Crece Contigo y la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración de la Universidad de la República (Udelar). Se visitaron hogares en los que vivían niños de hasta tres años, en los que el INE había aplicado la Encuesta Continua de Hogares entre febrero de 2012 y noviembre de 2013. Se hicieron 2.265 entrevistas (97% fueron respondidas por las madres) que involucraron a 3.097 niños de localidades de más de 5.000 habitantes de todo el país. En el estudio y en el procesamiento de datos participaron encuestadores, nutricionistas, demógrafos, psicólogos, sociólogos y estudiantes avanzados de psicomotricidad.

“A pesar de las mejoras en los ingresos de los hogares, hay problemas persistentes en términos de vivienda, en términos de ingreso, de nutrición, de desarrollo infantil, y hay otros aspectos que estudiamos pero no presentamos hoy, de prácticas de crianza que también muestran diferencias bastante significativas por nivel socioeconómico”, resumió Andrea Vigorito, coordinadora del grupo de investigadores de la Udelar.

Uno de cada cinco niños (21%) no vive con su padre. La encuesta permitió ver el impacto económico de esa situación, ya que de ese 21%, casi la mitad de esos padres (47%) no realiza aportes económicos al hogar del niño y 10% sólo lo hace ocasionalmente.La incidencia de la pobreza en los hogares encuestados se triplica respecto del promedio nacional (32,7%). Uno de cada cinco niños vive en situación de hacinamiento. Vigorito informó que la mayor parte de las madres no culminó la enseñanza media y que habían dejado de estudiar antes de quedar embarazadas. Quienes quedaron embarazadas mientras estudiaban no pudieron continuar sus estudios. La mayoría de las mujeres tenía trabajo, pero la mitad dijo haberlo interrumpido por más de tres meses por el nacimiento de su hijo. Se detectó una alta proporción de embarazos no planeados: 23%.

En cuanto a los cuidados durante el embarazo, 65% había cumplido con los controles recomendados y 74% lo había hecho tempranamente (primer trimestre). 10% de los niños nació prematuramente, alrededor de 5% presentaba retraso en la talla (esto se relaciona con la condición de pobreza, y los varones son los más afectados). Cerca de 10% tenían problemas de sobrepeso, 2% eran obesos (principalmente en hogares de altos ingresos, pero también los hay en hogares de bajos ingresos). Se halló déficit en consumo de pescado y de verduras, mientras que el consumo de sal está por encima de lo recomendado para un niño de esa edad. En cuanto al desarrollo emocional, los problemas prevalecen en los hogares de menores recursos y se agravan con el paso del tiempo.

Esta población será visitada nuevamente en agosto; uno de los principales aportes de la metodología aplicada es precisamente que intentará explicar procesos de vida. Los microdatos quedarán disponibles para que accedan a ellos diversos organismos, la academia y la sociedad civil. “Por primera vez va a haber información a nivel nacional” sobre indicadores de desarrollo, salud y nivel socioeconómico, destacó Mariela Solari, directora de Uruguay Crece Contigo.