El diputado y ex ministro de Economía de Argentina Axel Kicillof dijo que su procesamiento y el de la ex presidenta Cristina Fernández es una “prolija operación política”, cuyo objetivo es “proscribir” a la ex mandataria. El viernes el juez Claudio Bonadio los procesó por “administración infiel en perjuicio de la administración pública”, junto a otros 13 ex funcionarios, entre ellos, el ex presidente del Banco Central Alejandro Vanoli.

Además, Bonadio ordenó un embargo de sus bienes por más de un millón de dólares para cada uno de los procesados en esta causa.

La causa judicial fue iniciada por dirigentes de la coalición del actual gobierno, Cambiemos, que argumentaron que la administración de Fernández estaba vendiendo el dólar a futuro a un precio menor que el que tendría la divisa en los meses siguientes, por lo cual el Banco Central debería pagar la diferencia. Según Bonadio, las pérdidas del Banco Central fueron superiores a los 100 millones de dólares.

La defensa de los ahora procesados argumenta que el dólar a futuro se vendía al precio que la divisa tendría según la política económica de ese momento, y que escapa a su responsabilidad que el nuevo gobierno haya cambiado esta política, generando una devaluación del peso argentino y, por tanto, un encarecimiento del dólar.