El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, y el director nacional de Trabajo, Juan Castillo, cancelaron todas sus entrevistas de prensa previstas para esta semana, tras la decisión que adoptó ayer el Consejo de Ministros de mantener los lineamientos salariales del Poder Ejecutivo en los Consejos de Salarios previstos para 2016. Castillo se tomará esta semana para “reflexionar” sobre su permanencia en el cargo, y lo hará en conversación con su sector, el Partido Comunista del Uruguay (PCU). Dirigentes comunistas entienden que amerita revisar la permanencia de Castillo en la Dirección Nacional de Trabajo a raíz de esta decisión, dijeron a la diaria fuentes del Poder Ejecutivo y del sector. “En este escenario y en este contexto, prefiero no opinar”, se limitó a decir Castillo, consultado sobre la decisión del Consejo de Ministros. Precisamente ayer, otro comunista, el diputado Óscar Andrade, formalizó su renuncia a la banca, una decisión en la que pesó la postura del Ejecutivo con respecto a este tema.

Tanto Murro como Castillo entendían que los lineamientos salariales debían revisarse, a partir de la constatación de que la inflación no desciende y de los resultados de las negociaciones del último mes, en el que diez de 12 acuerdos colectivos se firmaron con la abstención o el voto en contra del Poder Ejecutivo. Los lineamientos para 2016 prevén aumentos entre 1% y 1,5% menores que los de 2015, vigentes hasta ahora, y las cláusulas de salvaguarda se activan sólo si la inflación supera el 12%. Murro sostuvo reiteradamente, la semana pasada, que los lineamientos habían sido “superados” por la realidad, y Castillo había dicho que la cartera quiere “argumentar” a favor de cambios en las pautas.

Sin embargo, ayer, durante el Consejo de Ministros, el tema tuvo un trámite rápido. El presidente Tabaré Vázquez se alineó con la posición del ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, de mantener los lineamientos previstos para 2016, e incluso le pidió que fuera el vocero de la reunión.

En conferencia de prensa, Astori anunció que las pautas salariales previstas para 2016 se mantendrán, por decisión del presidente Tabaré Vázquez. “Y ningún ministro manifestó su oposición”, agregó Astori. Fuentes del Ejecutivo informaron que Murro explicitó su postura favorable a revisar las pautas para evitar una pérdida de salario real. Finalmente, se acordó hacer un seguimiento de los resultados de la aplicación de estos lineamientos y tomar las medidas que correspondan “si se percibe que hay una tendencia al deterioro del salario real”, para “evitar que ese proceso se profundice”, informó Astori. “Hasta ahora eso [la pérdida de salario real] no ha ocurrido”, sostuvo el ministro. Destacó que tanto el salario público como el privado han seguido creciendo, aunque “a un ritmo menor” por la desaceleración.

Astori sostuvo que los lineamientos previstos para 2015 dieron “muy buen resultado”, porque “el porcentaje de acuerdos ha sido muy alto”. “A marzo de 2016, todos los grupos con convenios vencidos en junio de 2015 tienen un nuevo acuerdo colectivo, y 72% se obtuvo por consenso”, destacó Astori.

Dijo que las pautas previstas para 2016 fueron definidas “con la flexibilidad necesaria para ser consistentes con otras herramientas de política económica en este proceso de desaceleración que está viviendo el país”. En particular, sostuvo que los lineamientos permitirán “defender las fuentes de trabajo como un objetivo esencial” en un escenario “en el que se han perdido miles de puestos de trabajo, sobre todo en algunos sectores como la construcción”, y al mismo tiempo permiten combatir la inflación y, por lo tanto, contribuyen a “defender el poder adquisitivo” de los trabajadores. “Para eso entiende el gobierno que estos lineamientos salariales son los mejores, y por eso está confirmando su aplicación en la práctica”, insistió Astori.

Cambiemos

Los diputados frenteamplistas Luis Puig (Partido por la Victoria del Pueblo) y Gerardo Núñez (PCU) utilizaron el mismo sustantivo y el mismo adjetivo para referirse a la postura del Ejecutivo, a la que calificaron de “profundo error”. “Estas pautas salariales pueden consagrar en el corto plazo la pérdida del salario real, lo que para un gobierno de izquierda es muy grave”, consideró Puig. Dijo que la decisión debe modificarse y que el reclamo del PIT-CNT es “profundamente válido y legítimo”.

Núñez, en tanto, dijo que la postura del Ejecutivo “a esta altura parece responder más a un capricho que a una valoración política de la realidad”. Sostuvo que se está desconociendo la realidad de las negociaciones y que, además, se desconocen las reivindicaciones del movimiento sindical, a las que calificó de “justas y necesarias para este momento del país”. Respecto del rol que debe jugar el Frente Amplio (FA), Núñez consideró que “la lucha se va a intensificar en el movimiento social, y el FA debe estar acompañando este proceso de lucha de nuestro pueblo; no [debe] verlo como algo ajeno sino como algo propio”.

El diputado socialista Gonzalo Civila opinó que, más allá de la discusión sobre las pautas salariales, lo central es evitar la pérdida del salario real, y que en ese sentido es “imprescindible que se monitoree” su evolución.

“Es una tomadura de pelo”

Astori anunció que las jubilaciones mínimas (8.767 pesos) tendrán un aumento de 200 pesos a partir de agosto. El gobierno había resuelto postergar ese aumento para enero de 2017, lo que motivó protestas de la Organización Nacional de Asociaciones de Jubilados y Pensionistas del Uruguay (ONAJPU). Los jubilados reclamaban que, desde hace nueve años, en julio siempre se otorga un aumento a las pasividades sumergidas. Finalmente, el gobierno revisó su decisión y resolvió conceder un aumento, en una cifra que de todos modos no conforma a ONAJPU, ya que es la mitad del aumento otorgado el año pasado. El Ejecutivo también decidió otorgar boleto gratuito para el transporte urbano, tanto en Montevideo como en algunas ciudades del interior del país, a los jubilados que cobren menos de 11.400 pesos. El beneficio no incluye al transporte interdepartamental, y regirá entre agosto y diciembre de este año.

Brenda Mora, presidenta de ONAJPU, calificó el anuncio de “una tomadura de pelo”. “Los jubilados lo van a tomar con mucha tristeza. Un aumento de 200 pesos no da para hablar mucho, da para empezar una lucha. Pensarán que los jubilados no pensamos o no podemos reaccionar y luchar, pero creo que sí, que hay que trabajar. Esto es inaudito; deberían tener un poco más de consideración y de respeto”, cuestionó Mora.

Aproximadamente 130.000 personas cobran la jubilación mínima, y ONAJPU reclama equiparar el monto de esta al salario mínimo nacional.