Tras vencer 1-0 a Independiente del Valle de Ecuador en el estadio Atanasio Girardot, Atlético Nacional de Medellín se quedó ayer con la Copa Libertadores 2016. Miguel Ángel Borja, cuando apenas iban 8 minutos de juego, marcó el solitario gol de la victoria. La consagración significa el segundo título para Atlético Nacional, tras aquella primera vez conseguida en 1989. Además, el verdiblanco será recordado como el equipo campeón que más puntos obtuvo: 33, uno más que los que hizo el Boca Juniors argentino en 2003.

Empujó desde el inicio y tuvo un par de chances previas de abrir el marcador, hasta que, luego de un tiro libre frontal que no pudieron sacar ni la defensa ni el arquero ecuatoriano, y, tras rebotar en el palo, Borja la mandó a guardar con un tiro rasante desde el límite del área chica. Si bien el conjunto paisa dominó territorio y pelota durante los primeros 45 minutos de juego, no supo traducir esa supremacía en más goles. Atacó, sí, pero nada como para vencer nuevamente a Librado Azcona, arquero de Independiente del Valle.

Borja, Marlos Moreno, Orlando Berrío. Qué tridente. Fueron creación y oportunidades de gol para Atlético Nacional. A los 52 se juntó el primero con el segundo, este paró luego de carrera a toda velocidad, se la tocó atrás a Berrío y no fue gol de milagro.

Hubo un momento, promediando la segunda parte, en el que los ecuatorianos lograron imponerse en el juego. Entró bien desde el banco Jonny Uchuari, quien con Bryan Cabezas y José Angulo buscó el empate para los suyos. La buena zaga colombiana, más las intervenciones del arquero Franco Armani, siempre seguro, clausuraron todo intento ecuatoriano.

No pudieron los uruguayos de Independiente del Valle, pese a la gran campaña. Ni Pablo Repetto, desde la banca, ni Christian Núñez, Mario Rizotto o Emiliano Tellechea desde el verde césped. Nada. Ninguno. Claro: enfrente estuvo el gran candidato desde el minuto uno de la Libertadores. Méritos y merecimientos verdiblancos. Atlético Nacional de Medellín ganó la copa de principio a fin.