Entre los tricolores que dirige técnicamente Martín Lasarte, la idea también fue poner lo mejor en la cancha, aunque ayer no jugó el zaguero Diego Polenta, por razones lógicas: no estará en la primera fecha del Uruguayo Especial, tras la suspensión que acarrea del torneo pasado luego de ser expulsado en la última fecha contra Liverpool. Tampoco participó en el encuentro de ayer el delantero Sebastián Fernández, que entre semana sufrió una lesión leve, y en su lugar estuvo Tabaré Viudez, en su reestreno con la camiseta tricolor luego de estar varias temporadas en el exterior.

Tras un primer tiempo bastante discreto y parejo, Fénix logró sacar diferencias tras un gol de penal, luego de una sanción cobrada por el árbitro Fernando Falce tras un leve agarrón de Rafael García a Estoyanoff. El propio Lolo remató la falta, fuerte y al medio, para adelantar en el marcador a su equipo cuando transcurrían 35 minutos de juego. Antes y después del gol, en esa primera parte, Nacional fue dueño y señor de la pelota, pero sin profundidad, mientras que los albivioletas esperaban, trancando el juego y contragolpeando con la velocidad del propio Estoyanoff y la del panameño Waterman.

Antes del gol los arqueros fueron protagonistas. Primero el de Fénix, Darío Denis, que tapó un tiro libre de Brian Lozano con una gran volada; luego Esteban Conde hizo lo propio y evitó lo que pudo ser gol del lungo Ignacio Pallas. Esas dos y una incidencia en la que Viudez estrelló un remate en el palo fueron las principales chances, además del gol, de los primeros 45.

Con las mismas características más la lluvia, por momentos intensa, se jugó el segundo tiempo en el precioso césped del Parque Capurro. Ambos técnicos realizaron pocos cambios -raro en un partido de preparación- y el juego tuvo la misma tónica: los tricolores como protagonistas, haciendo circular el balón; Fénix agazapado, con una buena estrategia defensiva, y esperando dar el golpe en velocidad con los lanzamientos largos de Martín Ligüera. A propósito, ¿será el próximo 10 del tricolor? Nadie lo quiso asegurar en el Parque Capurro, pero el rumor es cada vez más fuerte y no sería raro que en el correr de esta semana el volante floridense retire sus pertenencias de Capurro y las lleve a Los Céspedes.

Volviendo a lo que pasó en la cancha, la insistente aunque poco efectiva ofensiva tricolor no podía vulnerar a la zaga local, y a los 61 de juego, tras una buena subida por la izquierda del lateral Ángelo Gabrielli, el panameño Waterman, suelto en el área, tocó sutilmente y marcó el 2-0.

Lo mejor de los tricolores ayer fue la conducción. Los volantes Gonzalo Porras y Santiago Romero manejaron bien la elaboración con Viudez como socio, pero al equipo de Lasarte en Capurro le faltó peso en el área. Fue bien marcado Kevin Ramírez por la zaga albivioleta y no lograron incidir por afuera ni Lozano ni Leandro Barcia. Anunciados, sin sorpresas ni explosión, todos los ataques de Nacional naufragaron sin generar mayor peligro sobre el arco de Denis.

Sin importarle la posesión de la pelota -nada nuevo en el accionar del equipo del santalucense Rosario Martínez-, Fénix generó peligro a su manera. Jugaron bien Maximiliano Cantera y el recién incorporado Matías Mirabaje en la transición de defensa a ataque, y cada vez que pudieron buscaron al panameño y al ingresado Lucas Cavallini como cartas de gol.

Con Nacional adelantado en la cancha en el intento por descontar, Cecilio Waterman aprovechó su destreza para cerrar el marcador. Casi desde la mitad de la cancha comenzó la corrida del punta centroamericano, quien llegó solo para definir ante la salida de Conde. 3-0 para el centenario Fénix.

Un par de minutos después terminó el encuentro, que dejó sonrisas entre los festejantes y caras serias en Nacional. Fermín Méndez.