Por decisión judicial, Andrés “Betingo” Sanguinetti, dirigente del Club Atlético Peñarol y hermanastro del ex presidente colorado Julio María Sanguinetti, pagó ayer una fianza de 30.000 dólares y esperará en libertad, pero con una tobillera electrónica y privado de su pasaporte, la posibilidad de ser extraditado a Andorra, donde está requerido como indagado en una causa que investiga el pago de coimas a funcionarios de gobiernos de países de América del Sur a cambio de contratos de obra pública por parte de la empresa constructora brasileña Odebrecht, según informó Montevideo Portal.
Ahora, el pequeño país europeo tiene un plazo de 40 días para formalizar el pedido, plazo en el que Sanguinetti permanecerá a disposición de la sede judicial. Hasta 2015 Sanguinetti fue funcionario de la Banca Privada de Andorra (BPA), institución financiera desde la que operaba Odebrecht para pagar los sobornos, y fue señalado por el ex abogado de la constructora Rodrigo Tacla Durán, que se amparó en la figura del arrepentimiento para vincular con las coimas a otros 12 funcionarios.
Consultado en junio por el portal Ecos, Sanguinetti dijo que su vinculación laboral con BPA era en régimen de exclusividad con una “actuación subordinada”.