El cooperativismo agrario en el departamento de Colonia tiene una tradición centenaria. En el presente se muestra como una entidad muy potente, que contribuye a los procesos de desarrollo que se generan en las distintas regiones del territorio departamental, según destacaron miembros de varios cooperativas a la diaria.

Afirmaron que existe “predisposición” por parte de las diferentes asociaciones “para participar y generar alianzas y redes de cooperación”, lo cual permitirá mantener el desafío de que las cooperativas “sean agentes que contribuyan significativamente al desarrollo en el medio rural y en las pequeñas ciudades vinculadas a la producción agraria”.

Guiados por esas premisas, en 2016 nació la Alianza de Cooperativas Innovadores de Colonia (Alcico). Esta asociación está integrada por las sociedades de fomento rural de Colonia Suiza (SFRCS) y de Colonia Valdense (SFRCV), el laboratorio agroindustrial cooperativo Colaveco y la Cooperativa Ruralista Agraria del departamento de Colonia (Cradeco).

Buscará asesorar a los productores desde actividades que potencien “el desarrollo del agro en Colonia, con una impronta de innovación y cuidado del medioambiente”, explicaron desde Alcico.

Esta asociación nuclea a empresas familiares, pequeños y medianos productores lecheros, queseros artesanales, agricultores, apicultores y ganaderos. Si bien la alianza “tiene un alcance nacional”, su principal zona de influencia está delimitada por los departamentos de Colonia, San José y Flores.

La sociedad está integrada por unos 1.500 productores, genera más de 200 puestos de trabajo directos y más de 1.000 indirectos; la facturación conjunta supera los 70 millones de dólares de acuerdo al balance realizado en 2020.

Asociación innovadora

La conformación de Alcico es “inédita” en Uruguay porque nuclea a cuatro cooperativas que están radicadas a distancias muy próximas unas de otras y que muchas veces compiten entre ellas en los mismos rubros. La alianza se formalizó en 2016 por medio de un proyecto apoyado por la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII).

De esta manera se trabaja en un reglamento interno de funcionamiento, se trazan objetivos, se establecen planes y estrategias para alcanzarlos. “La experiencia es innovadora y desafiante ya que une en pro de un bien mayor a cooperativas y sociedades de fomento que a su vez son competidoras”, opinó Mauricio Calvo, gerente de Colaveco.

Valoró que la experiencia de Alcico ha permitido generar “un espacio de creatividad, discusión, y desafíos que se pueden abordar en común sin generar esfuerzos aislados”.

Calvo destacó que a medida que Alcico concreta proyectos y lleva a cabo acciones, los socios intervinientes valoran la importancia de la alianza. “Son los socios quienes juzgan y determinan los caminos que va tomando Alcico. Se percibe como positivo que las cooperativas se hayan juntado por el bien común de los socios”.

Para Luis Jourdan, gerente de Sofoval, a la hora de implementar la experiencia asociativa algunos socios “lo han tomado con más entusiasmo y algunos son más escépticos”. Jourdan entiende que muchos de los planteos de Alcico “no son fáciles de ver en el presente porque tratamos de adivinar un poco el futuro, de ver hacia dónde van las cosas, tratar de ponernos siempre delante de donde estamos hoy, y eso, a veces, no es fácil de ver”.

De todas maneras, Jourdan destacó que la mayoría de los asociados “ven con buenos ojos que las instituciones cooperen entre sí” para el dinamismo y desarrollo de la producción.

Por su parte, Rocío Martínez, coordinadora de esta alianza, dijo a la diaria, que la formación de Alcico surgió como “una plataforma de vinculación y transmisión de tecnología” para “hacer algo que las cooperativas de manera solitaria no podrían hacer”.

Martínez es argentina y se instaló en Uruguay hace algunos años. Dijo que alianzas de este tipo también se encuentran en otros países, pero afirmó que la clave de la concreción de Alcico en Uruguay radica en las reducidas dimensiones de la superficie de su territorio. “Al ser un país chico ayuda a que se logren los intercambios entre cooperativas u otros institutos”, estimó.

Jourdan dijo que las cooperativas que forman parte de la alianza son “primas hermanas” y entiende que pensar en el futuro “va a depender de cuáles son los logros que podremos seguir consiguiendo con Alcico”, que “debe apuntar a consolidar esa alianza para que sea reconocida per se, más allá de la existencia individual de sus integrantes”.

Entre los planes de la asociación está el de desarrollar proyectos vinculados a tecnologías agrícolas, software, gestión, ambientales, sostenibilidad y sustentabilidad productiva, “que mejoren los diferentes eslabones de la cadena productiva de los socios”.

Los proyectos innovadores

Alcico tuvo un importante impulso en 2018. Ese año, con el apoyo de la Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE), la alianza implementó “un proyecto para el fortalecimiento y consolidación como espacio de articulación institucional y plataforma de innovación y transferencia tecnológica”.

En ese marco, la asociación logró explorar diferentes temas de trabajo, en función de las demandas de los productores y del medio. Entre los temas abordados aparecieron: certificación de productos elaborados de manera amigable con el medio ambiente, destino final de envases de agroquímicos, estudio de prefactibilidad de riego multipredial y multisectorial. Además se trabajó en fertilización nitrogenada variable, gestión de efluentes, cuidado del agua, pulverización selectiva y el uso de biodigestores en tambos.

Ahora Alcico trabaja en dos proyectos: incorporación de biodigestores en quesería artesanales y en el combate a “la plaga de la cotorra” que afecta a establecimientos de la zona.