A pesar de que los casos positivos de covid-19 vienen en descenso desde finales de mayo y las medidas de cuidado han disminuido desde el cese de la emergencia sanitaria, el virus sigue circulando y, por ende, la vigilancia genómica por parte del Grupo de Trabajo Interinstitucional (GTI) en Vigilancia Genómica de SARS-CoV-2 y el Departamento de Laboratorio de Salud Pública también continúa.

En ese marco y sumado a que “hay un claro incremento de la movilidad” y “mayor circulación de nuevas variantes en la región”, el Ministerio de Salud Pública (MSP) informó este lunes, a través de un comunicado, que en el país se encuentran circulando distintas subvariantes de la variante ómicron. Además de la ya conocida BA.2, el grupo detectó la presencia de los sublinajes BA.4, BA.5 y BA.2.12.1.

El 25 de junio el Departamento de Vigilancia en Salud ya había dado a conocer la llegada de estas subvariantes. Sin embargo, el ministro de Salud, Daniel Salinas, confirmó a la diaria que la cartera decidió publicar ahora un comunicado para exhortar a que la población mantenga “las medidas no farmacológicas de carácter preventivo” y recordar “la importancia de completar la vacunación contra la covid-19 que continúa siendo efectiva”.

Asimismo, el MSP manifestó que “no se han demostrado cambios significativos en el impacto en la salud pública con respecto a los sublinajes anteriores de ómicron” y que “el único elemento ya demostrado es su alta capacidad de transmisión”.

Según la cartera, las mutaciones del virus son parte de “un evento natural y esperado dentro del proceso evolutivo de los virus, y que este comportamiento es similar al identificado a nivel regional y global con la variante ómicron como la predominante desde enero de 2022”.

En una línea similar a la importancia de las vacunas expresadas por el MSP, Mónica Pujadas, epidemióloga e infectóloga pediatra, aseguró a la diaria que, a pesar de las distintas variantes que circulan, “las vacunas siguen siendo efectivas”. Si bien manifestó que el sublinaje BA.5 es “más contagioso” que la BA.2, con algunos síntomas respiratorios como “mucho dolor de garganta”, dado que “la pandemia no ha terminado en el mundo”, el “riesgo de oscilaciones siempre va a existir”.

Sin embargo, para Pujadas es gracias a la inmunización que a pesar de las oscilaciones, “los casos fatales” no las “han acompañado”, sino que “se van desacoplando desde mediados de 2021”. En resumen, la epidemióloga consideró que la situación epidemiológica actual del país está en un “control relativo” y que “la enfermedad se ha ido concentrando más en los grupos no vacunados, ya sea adultos o niños”.