James Caan, ícono de Hollywood en los 70 y 80, murió este miércoles a los 82 años, según confirmó su cuenta oficial de Twitter, la misma en la que el actor rememoraba frecuentemente sus andanzas en la industria del cine y cerraba sus textos con un simpático “fin del tuit”. “Es con gran tristeza que les informamos acerca del deceso de Jimmy en la noche del 6 de julio. La familia agradece la gran cantidad de amor y sentidas condolencias, y pide que continúen respetando su privacidad durante este tiempo difícil. Fin del tuit”, escribieron con guiño incluido.

Sin dudas, el rol más famoso de toda su carrera fue el de Sonny Corleone en El padrino (1972) de Francis Ford Coppola, por el que fue nominado a mejor actor. Según recuerda The Hollywood Reporter, Caan había sido elegido para interpretar a Michael, el hermano menor, pero Coppola insistió con que solamente él podría hacerle justicia al personaje.

Finalmente le tocó el papel de hijo mayor y heredero aparente del imperio criminal de su familia, hasta que era emboscado y acribillado por gánsteres rivales en una de las muertes más famosas de la historia del cine. “Mira cómo masacraron a mi muchacho”, diría Marlon Brando en una frase que se transformó en meme.

La carrera de James Caan se extendió durante seis décadas e incluyó al atleta veterano en Rollerball (Gladiadores del futuro, 1975) y un año después se movió de manera silenciosa en la película muda La última locura de Mel Brooks. Más adelante integraría el extenso reparto de Dick Tracy y protagonizaría la adaptación de Misery de Stephen King, ambas estrenadas en 1990. Este último rol lo tuvo postrado y bajo el reinado del terror de Kathy Bates durante gran parte del film. Más cerca en el tiempo bromearía con su propia imagen de tipo rudo en El duende (2003) junto a Will Ferrell.

Además de innumerables apariciones, Caan era famoso por los papeles que no aceptó. Entre ellos, los roles protagónicos en Contacto en Francia (1971), Atrapado sin salida (1975) y Kramer versus Kramer (1979), que le valieron premios de la academia a Gene Hackman, Jack Nicholson y Dustin Hoffman, respectivamente. También rechazó ser Han Solo en Star Wars: Una nueva esperanza (1977), el capitán Willard en Apocalypse Now (1979) y un papel en Superman (1978).

“Si hay una cosa a la que atribuyo mi éxito, es haber dicho que no”, dijo en una entrevista de 1988. “Vas a una audición y todos son siempre muy amables y cordiales, y te dicen: '¿Cómo está usted, señor?'. Si no me gustaba el trabajo, lo rechazaba. Y cuando me estaba yendo, decían '¿y este mocoso quién se cree que es? ¡Va a trabajar conmigo, ya va a ver! ¡No puede decirme que no a mí!'”.

James Edmund Caan nació en Nueva York el 26 de marzo de 1940, hijo de inmigrantes judíos que llegaron desde Alemania. No terminó su carrera en la Universidad Hofstra, pero allí descubrió su interés por la actuación y se hizo amigo de Coppola. Estudió cinco años en The Neighborhood Playhouse of the Theatre y comenzó a tener papeles pequeños en teatro, cine y televisión a comienzos de los 60. Dos años después de su debut cinematográfico, recibió una nominación al Globo de Oro por El gran combate (1965). Esa década lo tendría apareciendo regularmente en series televisivas, incluyendo El superagente 86.

Entre 1983 y 1986 no trabajó en Hollywood. “Tenía suficiente dinero y entrenaba niños a tiempo completo. Fútbol, béisbol, fútbol americano, básquetbol”, recordó en la citada entrevista con Rober Ebert. “Trabajando con niños no necesitaba esperar seis meses de edición y musicalización. Como entrenador, ocurrían hechos creativos frente a mis ojos. Lo disfrutaba, y pensaba que si luego aparecía una película que me apasionara, la haría. Y luego, para ser sincero, me desperté una mañana y descubrí que había perdido todo mi dinero. De un día para el otro”. Su regreso sería en Jardines de Piedra (1987), también dirigida por Coppola.

Caan se casó cuatro veces y tuvo cinco hijos. El único de ellos que siguió su carrera fue Scott, quien protagonizó la remake de Hawái 5.0 y compartió pantalla en un episodio de 2012. Actualmente era uno de los nombres que Coppola manejaba para su proyecto titánico Megalópolis.