Aunque pueda evocar la “rueda rueda de pan y canela”, el nombre de Vuelta Canela alude a la forma en que en otras latitudes –Venezuela y Colombia, por ejemplo– llaman a lo que en el Río de la Plata nombramos como “vuelta carnero”. “Vuelta Canela alude al dar vueltas, jugar con el cuerpo y la música, una manera de encontrarnos en esas piruetas y transmitir emociones. Vuelta Canela nos mueve, nos desafía, nos emociona, nos hace encontrar a cada uno de nosotros en el lugar donde ejercemos y desplegamos nuestro mayor arte”, dice Laura Asensio a la diaria.

Ese espíritu movedizo y juguetón se vincula con la experiencia en el contacto con niñas y niños en la actividad docente que sus integrantes desempeñan. El grupo se conformó en 2007 a partir de la confluencia de sus cuatro integrantes, todos ellos maestros de primera infancia. “La actividad en la docencia formó parte y sigue estando en las actividades de cada uno. El contacto permanente con las infancias es clave para nuestro hacer, y la creatividad nace muchísimas veces desde este espacio con los niños y niñas. El estar cerca, observarlos, conocerlos, compartir con ellos in cotidiano hace que nuestra capacidad receptiva y creativa esté muy ejercitada”, afirma.

Una banda con 16 años de historia

Vuelta Canela son Filomena (Nina Lenze), Gora (Mariano Gora), Lua (Laura Asensio) y Tizán (Santiago Reyes). Se formó a partir de una formación y un interés común, pero también de la amistad entre ellos, por eso la amistad es un valor fundamental con el que se embanderan y que consideran el motor de su universo lúdico y creativo. La primera canción que compusieron fue “Violín viajero” y su primer espectáculo, Viaje al compás. A partir de entonces, en sus 16 años de historia han publicado cuatro discos –Viaje al compás, Al vaivén, Pasatiempo y Juegos canelos y tres libros, y han cosechado canciones como “Enrodados”, “Golpeteo”,, “Mi caballo y una versión de la hermosa “Canción para bañar la luna”, de María Elena Walsh, referencia ineludible en la música para la infancia.

Su propuesta abreva del clown y de un entramado de ritmos y géneros diversos. “El clown es un aporte hermoso y divertido que forma parte fundante de Vuelta Canela. El ejercicio de reírnos de nosotros mismos y de emocionarnos con lo más sutil es parte también de este trabajo que hacemos conjuntamente con el arte del clown”, comenta Asensio. Y agrega: “No podemos clasificar nuestra música porque es todo eso... es música que nace desde algo que nos convoca. Y desde allí componemos. A veces desde un género específico, otras mezclando y dándole nuestra propia forma. Lo literario también nos gusta, por eso le damos importancia a que haya riqueza poética además de las rimas e historias que se van narrando”.

Este domingo en la Zitarrosa van a presentar el espectáculo Diario de canciones, en el que repasarán sus cuatro discos, incluyendo “hits infaltables, perlitas rescatadas, tesoros reversionados y mucha variedad de ritmos y melodías”. “Será un recorrido por nuestro repertorio. Nuestras expectativas son poder cantarles y tocar para todas aquellas familias que nos acompañan y alientan siempre desde Uruguay. Estar cerca y poder mirarlos y disfrutar de su presencia es lo que estamos esperando vivenciar”.

La cita es este domingo a las 15.00 en la sala Zitarrosa, las entradas están a la venta por Tickantel y hay 2x1 para Comunidad la diaria.