Peñarol quiere reforzar la zaga porque se vio vulnerado en los partidos de verano y no conformaron los rendimientos del siempre firme Maxi Olivera, que cargó con un error garrafal de concepto en el último clásico; tampoco conformó la performance de Leo Coelho, el tan mentado futbolista brasileño que tuvo su paso por el tricolor y terminó firmando por el tradicional rival en medio de un escándalo que incluyó amenazas públicas al muchacho.

Coelho había sido figura en Fénix y también lo fue en Nacional. Es entendible que un jugador extranjero no tenga peros en ir y venir de bolsos a manyas, pero en las tribunas y las redes le hicieron saber su descontento propios y extraños. Aquello no significa que el jugador no sea uno de los mejores del medio; no cualquiera es pretendido por ambos ambiciosos equipos grandes de nuestro país.

Sin embargo, Peñarol busca refuerzos en la zona luego de ver partir a Hernán Menosse, de quien en principio se había hablado que renovaría. Los mirasoles, al mismo tiempo, dejaron de lado al Vasquito Matías Aguirregaray, que terminó firmando por los monos de Villa Dolores.

Peñarol entonces puso sobre la mesa las competencias de tres zagueros. El más cercano quizás sea el proveniente de Boston River que se encuentra de pretemporada con el equipo de Jadson Viera; se trata de Guzmán Rodríguez, con quien entablaron conversaciones primarias que se encuentran en el aire, mientras aparecen los nombres de Matías de los Santos, el chileno Benjamín Kuscevic y el paraguayo Bruno Valdez.

El uruguayo De los Santos, de 31 años, militó la pasada temporada en filas de Colo-Colo. Su pase pertenece a Vélez Sarsfield, pero no está en los planes del fortín. El chileno, de 27 años, no es tenido en cuenta por el Coritiba de Brasil, que quiere venderlo y le puso el precio de 1.200.000 dólares. Valdez no es el predilecto para ocupar la defensa del enorme Boca Juniors, jugó 37 partidos con la camiseta xeneize.

Por otro lado, Peñarol anunció que Brian Mansilla fue cedido a Defensor Sporting y que una suerte parecida pueden correr Máximo Alonso y Mathías de Ritis, con chance de salir a préstamo.

En Miramar, donde fue a parar Aguirregaray, también anunciaron la llegada de otro manya: Pablo López, que buscará minutos que en Peñarol no encuentra. Pero además el cebrita consiguió una alta relevante al asegurar la presencia, a mil rayas, del delantero brasileño Douglas Jardel Bittencourt, goleador de la Segunda División en la última Liga de Ascenso. El futbolista jugó en Tacuarembó y fue estrella del norte, convirtió 16 goles y concedió tres asistencias en un total de 23 partidos. Seguro en la hinchada del equipo fusionado fantaseen con la renovada historia de otro brasileño que fue ídolo en el equipo del parque Batlle: Sapuca, a quien quizás alguno le prendió una vela.

En filas bohemios, Alejandro Cappuccio trabaja en silencio, como es su estilo. Sin parafernalias sumó al exarquero de Tacuarembó que desde pibe la rompe: Jhonny da Silva. Se sumó a una lista de novedades que lleva los nombres de Gonzalo Vega, una estampita de Cappuccio, Leandro Otormín, una garantía de buen juego, y Gonzalo Freitas, el espigado volante que siempre juega bien.

Además, se aseguró al argentino Leonel Bontempo, que viene de jugar en San Martín de San Juan, y que además vistió las camisetas de los argentinos Quilmes, Barracas Central y Deportivo Morón, además del equipo español Racing de Santander. El sábado se miden en amistoso con Montevideo City Torque.

En Liverpool festejan los ascensos de los juveniles, una marca registrada del negro de la cuchilla de Belvedere. El último en debutar fue Lucas Fraga, que proviene de las tierras de Mario Benedetti, Paso de los Toros, y que vive en la residencia del club de José Luis Palma. Todo esto mientras Luciano Rodríguez la rompe en el Preolímpico y es pretendido por varios equipos que buscan negociar al delantero con el equipo negriazul. El último en levantar la mano fue River Plate de Argentina. El millonario quiere el 60% de Rodríguez, quien hizo los tres goles de Uruguay en el debut con derrota frente al equipo paraguayo. River compite con el Feyenoord de Países Bajos, que ofreció diez millones de euros más cuatro en variables para llevarse al jugador. También aparecieron el Napoli y el Atlético de Madrid como en un remate de Bavastro.

El Príncipe Enzo Francescoli viajó a Uruguay para reunirse con Palma, quien pretende recibir 15 millones de euros por el 70% del pase. Algo similar ocurrió con Nicolás de la Cruz antes de su llegada a River, e incluso previo a su reciente arribo al Flamengo. Rodríguez significa una marca de nueve goles y seis asistencias en 31 partidos con el campeón uruguayo, pero además fue campeón del Mundo sub 20 con la celeste de Marcelo Broli, convirtiendo el gol de la final contra los tanos.

En Racing anunciaron por último la contratación de Óscar Quiñónez. En Fénix, la de Ramiro Hernández, y en Danubio, la de Ramiro Brazionis. En Boston River, que se aseguró a Hernán Menosse, lo dicho, festejaron las llegadas de Franco Pérez y Enzo Larrosa al equipo que dirige el debutante Jadson Viera, que en las últimas horas sufrió un siniestro de tránsito, pero que se encuentra fuera de peligro y en recuperación para volver a la preparación con su nuevo equipo.