Benjamin Netanyahu, el primer ministro de Israel, anunció este domingo en una declaración difundida en video que rechaza las condiciones planteadas por Hamas para la liberación de más de un centenar de rehenes israelíes que siguen en su poder desde octubre. “Hemos traído de vuelta a casa a 110 rehenes hasta ahora y vamos a traerlos a todos. Estoy trabajando en ello a todas horas, pero seamos claros: rechazo de plano las condiciones de rendición de los monstruos de Hamas”, dijo.

El gobernante comunicó que, a cambio de la liberación de los rehenes, el movimiento armado palestino exigía el fin de la guerra, la salida de las fuerzas militares israelíes de Gaza, “la liberación de todos los asesinos y violadores de las [milicias] Nujba y dejar a Hamás intacto”, según citó la agencia Europa Press.

“Si aceptamos esto, nuestros guerreros cayeron en vano y no podremos garantizar la seguridad de nuestros ciudadanos”, agregó Netanyahu, según informó Efe. El gobernante dijo que la “presión militar es la única solución” para que los israelíes que fueron evacuados de zonas cercanas a Gaza puedan regresar “sanos y salvos a sus hogares” y para que no se repita “otro 7 de octubre”, cuando Hamas mató a más de 1.200 personas en Israel y secuestró a 240.

Netanyahu, además, advirtió que no está dispueso a ceder en su defensa del “completo control de seguridad israelí sobre todo el territorio al oeste del Jordán” y dijo que “la creación de un Estado palestino habría sido un peligro existencial para Israel”. Agregó: “Mientras sea primer ministro seguiré apoyando firmemente esta posición. Si alguien tiene una postura diferente, que se postule y explique su postura honestamente a los ciudadanos de Israel”.

Estas declaraciones llegan en un momento en que el número de muertos por la ofensiva israelí en Gaza trepó a 25.000, y en que Estados Unidos y la Unión Europea insisten en que este conflicto debe resolverse con la solución de dos estados.

Dentro de Israel, los familiares de personas secuestradas por Hamas organizan movilizaciones en reclamo de que el gobierno establezca como prioridad su liberación. Este domingo, el Foro de las Familias de los Rehenes decidió acampar frente a la residencia del primer ministro para exigir que se llegue a un acuerdo al respecto.

En un comunicado, esa organización le advirtió a Netanyahu: “Hemos estado suplicando desde hace 105 días. Ahora es el momento de exigirlo: hay que detener las ejecuciones de los rehenes, hay que demostrar liderazgo y hace falta una decisión valiente para avanzar en un plan que sabemos que está sobre la mesa”. Los familiares reclaman una conferencia internacional para negociar un acuerdo, en la que participen Israel, Estados Unidos, Qatar y Egipto.

Estos dos últimos países, que han actuado antes como mediadores, impulsan un plan de cese del fuego en tres etapas, que se extendería por 90 días, según publicó el diario estadounidense The Wall Street Journal. Ese plan incluye, en una primera fase, un alto el fuego, la liberación de rehenes civiles y la excarcelación de presos palestinos. De acuerdo con Efe, también contempla la retirada de Gaza de las tropas israelíes, la libertad de movimiento en ese territorio y el aumento de la ayuda humanitaria que Israel permite que ingrese.

En etapas siguientes, el plan establece la liberación de mujeres militares israelíes y la entrega de cuerpos de rehenes que murieron en cautiverio, que según se estima son 27, y más tarde serían liberados todos los demás rehenes.

Mientras este conflicto continúa, ataques en Siria y Líbano fueron atribuidos este domingo a Israel. En la capital de Siria, Damasco, el bombardeo contra un edificio en la zona de Mezzeh, donde se encuentran varias sedes diplomáticas, mató a diez personas, cinco de ellas integrantes de la Guardia Revolucionaria de Irán.

El presidente iraní, Ebrahim Raisi, dijo que no quedará sin respuesta el “crimen del régimen sionista”, que calificó de “cobarde acto terrorista”. Afirmó que este ataque, que “violó el espacio aéreo de Siria y pisoteó las leyes humanas e internacionales”, quedará como “otra mancha en el historial de todos los gobiernos que dicen ser defensores de los derechos humanos”.

Poco después de este ataque, hubo otro, lanzado con drones contra un auto que transitaba por el sur de Líbano. La Agencia Nacional de Noticias libanesa informó que se trató del segundo hecho de este tipo en menos de 24 horas y lo atribuyó a Israel. En esa zona, donde el ejército israelí ha intercambiado ataques con Hezbolá, ya se le habían adjudicado al gobierno de Netanyahu atentados que mataron a líderes de esa milicia chiita y de Hamas.