La ministra de Vivienda, Irene Moreira, concurrió este martes a la sede del PIT-CNT para la firma de un convenio por el que el Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial adelanta fondos -2% de la retención final- a 11 cooperativas del Programa de Vivienda Sindical para que concluyan sus obras.

En conferencia de prensa, Moreira señaló que el ministerio es “sensible” a la preocupación de “la casa propia” y con esta iniciativa demuestra que no pretendía “refundar ningún ministerio”, pero “sí potenciar” los distintos programas.

“Evidentemente la cooperativa es una muy buena herramienta, una puerta de acceso a la vivienda. Hoy por hoy, estas 11 cooperativas, que implican a un número importante de familias, van a poder finalizar de una vez por todas las viviendas. Eran cooperativas que por un motivo u otro no habían podido tener ese empujón final para poder finalizar su casa”, explicó.

Señaló que el convenio será el “puntapié” que se necesitaba para que puedan concluir las viviendas, y anunció que el 19 de diciembre se estará realizando un nuevo sorteo de cooperativas. “Ahí vamos a tener muy buenas noticias para el cooperativismo en general”, adelantó.

Por su parte, el presidente del PIT-CNT, Marcelo Abdala, señaló que la firma del convenio era un “motivo de alegría y de orgullo, porque tenemos un acuerdo para acelerar el trámite”, que “es muy importante” porque abarca a más de 500 familias”.

“Cuando hablamos del convenio de vivienda sindical nos referimos a más de 10.000 familias en todo el territorio nacional, 270 cooperativas conformadas, más 20 que están en configuración. Ya a fines de este año vamos a estar en el entorno de más de 2.700 viviendas entregadas, con seis modos constructivos distintos, no tradicionales, en donde combinamos ayuda mutua” y “la población trabajadora con capacidad de pago pero todavía sin capacidad de ahorro, afirmó

Destacó al cooperativismo como “un torrente más que puede ayudar a resolver el problema de la vivienda” en el país. “Es recontra festejable cuando se produce una sinergia entre las políticas públicas y el movimiento obrero, que demuestra que no está solamente para la protesta ni para levantar su voz en defensa de los trabajadores, sino que es una fuerza constructiva para el bien de las uruguayas y uruguayos”, concluyó.