Al igual que en la Cámara de Diputados, el Senado derogó con votos del oficialismo la Ley 19.654, que interpretaba los artículos 77 y 81 de la Constitución y buscaba habilitar el voto de uruguayos en el exterior.

La ley fue aprobada en el segundo gobierno de Tabaré Vázquez y su primer artículo establecía que “el hecho de residir fuera del país no obsta al ejercicio de los derechos y obligaciones inherentes a la ciudadanía”.

Asimismo, instaba a crear una comisión honoraria en donde se pensaban alternativas jurídicas para instrumentar el voto de uruguayos residentes en el exterior, que tenía como fin último remitir un proyecto de ley al Parlamento para que se los habilite. La normativa fue declarada inconstitucional por la Suprema Corte de Justicia en 2020, informó El País.

El senador frenteamplista José Carlos Mahía señaló en sesión que su fuerza política no comparte el pronunciamiento contrario que se dio en el plebiscito de 2009. Indicó que, “paradójicamente”, en el país se celebra la participación cívica de ciudadanos de distintos países, particularmente de América del Sur, y, sin embargo, “no se toman acciones desde el punto de vista legislativo que sí tengan la misma posibilidad de hacerlo con los nacionales”.

En ese sentido, afirmó que Uruguay tiene el “triste privilegio” de ser “el único país de toda América del Sur que no habilita el voto a sus nacionales, a los uruguayos que siguen siendo uruguayos residiendo en el exterior”.

Por su parte, el senador frenteamplista Mario Bergara indicó que no se trata de un derecho “que se plebiscitó”, sino que ese derecho, que es el de ejercer el sufragio, está consagrado en la Constitución. “Aquellos que tienen la capacidad económica de pagarse el pasaje, de pagarse una estadía, de venir a votar, pueden hacerlo sin que nadie les diga ‘ah, no, vos residís en el exterior, entonces no podés votar’. Por lo tanto, que un artículo interprete que residir en el exterior no obsta al ejercicio de los derechos y obligaciones de la ciudadanía, no encontramos que violente ni modifique ninguna sustancia de lo que está escrito en la Constitución”, explicó.

Por su parte, el senador cabildante Guido Manini Ríos insistió con que el “pueblo uruguayo” ya laudó el tema en las urnas, cuando se planteó el voto desde el exterior. “Era epistolar, no consular, se puede poner el agregado que se quiera, pero el espíritu con que el pueblo uruguayo fue a votar era contra el voto [de los uruguayos] que están en el exterior. 63% de los uruguayos no acompañó la iniciativa”, expresó.

Manini Ríos apuntó que hay que acatar “lo que decide el pueblo uruguayo”. “Yo creo que es realmente negativo y malo para la democracia y para el sistema político consultar al pueblo y después, si no nos gusta lo que falló, legislar en contra y buscarle la vuelta y cambiar el término e ir, en definitiva, contra lo que realmente el pueblo quiso expresar en las urnas”, agregó.

En tanto, el senador blanco Sergio Botana indicó que le “avergüenza” cómo se dio el debate sobre el voto en el exterior y “no nos hayamos acordado un segundo, a lo largo de todo el debate, de nuestros conciudadanos del interior de la República”.

Indicó que en Uruguay, “si cualquier ciudadano de credencial de zona rural está internado en el hospital del pueblo, o por una cuestión laboral no puede estar en su pueblo o en otra zona rural, en Uruguay no hay voto observado para él. Sinceramente me acordaría antes de los ciudadanos que sostienen este país trabajando de sol a sol cada día adentro de este país y que no tienen esa posibilidad”, concluyó.