En el marco de la presentación del programa Promoción de Empleo, el secretario general del Sindicato Único Nacional de la Construcción (Sunca), Daniel Diverio, planteó que esta nueva iniciativa forma parte del convenio colectivo con la Cámara de la Construcción y que es una notable mejora para el grupo de trabajadores.

En rueda de prensa, señaló que el programa “es muy importante porque recoge un planteo” histórico de los trabajadores sobre la modalidad en la que se trabaja en un sector en el que 80% de sus trabajadores son contratados a término, es decir, hasta que finaliza la obra.

Según Diverio, eso genera una permanente entrada y salida, y, fundamentalmente en el interior más profundo, cuando surge una obra los trabajadores encuentran la posibilidad de quedarse en su lugar de residencia y generar las condiciones para no tener que emigrar.

Diverio resaltó que el sector tuvo cambios importantes desde 2020 hasta la fecha. Recordó que en 2019 entre 35% y 40% de los trabajadores de la construcción dependía de las obras del sector público, pero que luego “hubo un freno” y casi 80% de los empleados actualmente dependen de la inversión privada.

“Es válido, pero la dificultad que tiene la inversión privada es que se genera donde hay más rentabilidad”; es el caso, por ejemplo, de las viviendas promovidas en Montevideo, Canelones y parte de Maldonado. En tanto, en el resto del interior “se complica más porque no hay casi presencia” de este tipo de obras, entonces la inversión pública “toma un papel fundamental”, sostuvo.

En cuanto al interior, Diverio agregó que hay expectativas desde el inicio de la actual administración de gobierno, particularmente por el anuncio de una inversión por una suma cercana a los 1.000 millones de dólares en obras de saneamiento, principalmente en el interior del país. “Hoy nos encontramos con que esa inversión pasa a 350 millones de dólares y ahora nos están anunciando que posiblemente en la segunda etapa este año se empezaría a hacer algunas especificaciones”, continuó el dirigente, y señaló que el sindicato cuenta “con esas obras para sostener lo que ha sido la caída de UPM y el Ferrocarril Central”, porque al terminar esas dos obras la caída de la mano de obra fue de “casi 10.000 puestos de trabajo”.

Por último, Diverio dijo que en noviembre de 2023 había entre 62.000 y 63.000 trabajadores registrados en el Banco de Previsión Social, pero que actualmente son entre 52.000 y 53.000, si bien valoró que “no es un número bajo”.