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Planta de UPM, en Fray Bentos (archivo, noviembre de 2016).

Foto: Federico Gutiérrez

UPM confirmó la instalación de su segunda planta en el país

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A través de un comunicado de prensa, la empresa finlandesa UPM confirmó su decisión de invertir 2.700 millones de dólares en una nueva planta pastera de celulosa de eucaliptus en el norte del departamento de Durazno.

La planta tendrá capacidad para procesar 2,1 millones de toneladas y aumentará la producción de la empresa en más del 50%, “lo que resultará en un cambio significativo en la escala de su área de negocio”, dice la empresa en el comunicado. Además, se anuncia que habrá una inversión adicional de la empresa de 350 millones de dólares en el puerto de Montevideo y en instalaciones locales en Paso de los Toros. El inicio de su operatividad se estima que será en la segunda mitad de 2022.

“Los prerrequisitos para la inversión se han preparado cuidadosamente en cooperación con el Estado uruguayo. Para UPM, ha sido importante garantizar operaciones sostenibles y competitivas a largo plazo y minimizar los riesgos tanto en la fase del proyecto como en operación”, dice la empresa. Según destaca, “para Uruguay, esta inversión y la mejora de la infraestructura ofrecen importantes oportunidades para el desarrollo económico y social”.

El país, en efecto, “ha demostrado una visión consistente a largo plazo en el desarrollo de las condiciones necesarias para atraer la inversión extranjera, construyendo las bases para el desarrollo industrial”, según dice Jusi Pessonen, CEO y presidente de UPM.

El comunicado además señala que una vez finalizada la construcción, la planta aumentará el Producto Interno Bruto de Uruguay en aproximadamente 2% y, el valor anual de las exportaciones del país en aproximadamente un 12%.

La construcción a su vez empleará a un pico de 6.000 personas, y la empresa estima que una vez finalizada esta, se crearán cerca de 10.000 empleos permanentes en toda la cadena de valor, de los cuales unos 4.000 serán empleados directos de UPM y sus contratistas. La planta estará ubicada en zona franca y pagará un canon anual fijo de 7 millones de dólares por año.

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