A diferencia de lo que ocurrió en la campaña para la primera vuelta, los candidatos a la presidencia deberán enfrentarse en un debate televisado antes del balotaje. Ayer se reunieron los representantes de Yamandú Orsi y Álvaro Delgado para definir los detalles del encuentro televisado. El primer acuerdo al que se llegó es que ambos candidatos deberán tomar medio litro de vino antes de comenzar el debate. “Acá no solamente se trata de tener un buen debate. Acá de lo que se trata es de defender la institucionalidad, porque la verdadera antipolítica comienza con el desinterés por la política. Y un debate con Delgado y Orsi estando sobrios sería la cosa más aburrida del mundo. Como mucho, lo verían tres personas. Pero con los dos medio entonados cambia la cosa. Ponemos el límite de medio litro porque la idea tampoco es que arrastren las eses, pero un poquito achispados y desinhibidos por el efecto del alcohol tienen que estar”, indicaron desde el comando de uno de los candidatos.
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Darwin Núñez y José María Giménez.
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