Autor de Los caballos lunares (1991), Toda la muerte (1999), El infinito es solo una forma de hablar (2011) y Bajo la noche (2016), Horacio Verzi (Montevideo, 1946) publicó este año Nubes con cuervos. Deben mencionarse los antecedentes porque este escritor ha transitado con una injusta discreción mediática por la literatura uruguaya. Periodista en Centroamérica, investigador en Cuba y formador de docentes en Uruguay, viviendo entre Maldonado y Roma, es un fondista y un profundista de la narrativa.
Al comienzo de la novela, una pareja observa desde su habitación las aves oscuras que se dan cita en los techos romanos. La conversación adquiere ribetes filosóficos y artísticos mientras va tomando cuerpo la densa trama del vínculo de los personajes. Se desgranan con cuidado antecedentes, que se retrotraen a una colonia psiquiátrica uruguaya y, aún más, a un ambiente religioso, que dejan huellas indelebles de inquietud psicológica e intelectual, pero también reflejan una fiesta de la palabra y las escapadas al bar cercano.
La trama podría resumirse de manera escueta. No así la poesía que bulle, ni la inquietud acerca del destino de los personajes, o el afinado ejercicio de la lengua, que incluye un torrente de homenajes poéticos nacionales y universales, invita a atravesar la frontera entre cordura y locura, entre narrativa y poesía, entre una mujer y otra, o entre la ficción y la sensibilidad de quien lee. No se sale incólume del viaje, eso es literatura, o amor, y quien lo probó lo sabe.
Horacio Verzi. Yaugurú, 2022. 729 páginas. 900 pesos.