En el reparto de recursos presupuestales 2026-2030 para los municipios, Punta del Este salió perdiendo. Es el municipio que menos recibirá de los ocho que componen el territorio departamental y tendrá una merma en los fondos para vigilancia, según el presupuesto “corto” presentado por la Intendencia de Maldonado (IDM), a cuenta de la readecuación que se planteará a mediados de 2026.
A Punta del Este se le asignarán 167.740.524 pesos para todos los rubros, la quinta parte de lo que recibirá el Municipio de Solís, por ejemplo. De este monto, 1.076.580 dólares se destinarán a inversiones, casi en su totalidad aportados por el Fondo de Incentivo a la Gestión Municipal de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto.
Las autoridades municipales asistieron en estos días a la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Junta Departamental de Maldonado –que aprobaría el presupuesto corto a principios de octubre– para exponer sobre las necesidades de la jurisdicción. El alcalde Javier Carballal y los concejales (todos del Partido Nacional) reivindicaron a Punta del Este como el “motor” de la economía departamental y adelantaron que “pelearán” por recursos “acordes a los ingresos” que genera el balneario.
Según la versión taquigráfica de la comparecencia ante los ediles, Carballal y los concejales Martín Laventure (quien fuera director de Turismo en la administración Enrique Antía) y María Antía (hija del exintendente) remarcaron que, si las instancias presupuestales no atienden las necesidades de vecinos y contribuyentes a través del municipio, la IDM debe hacerse cargo “de la respuesta que hace falta” a través de las direcciones generales.
“Punta del Este es el gran generador de la mayoría de los ingresos que recibe el presupuesto departamental. Vamos a plantear que se atienda lo que genera. No porque sea mejor o peor, sino porque es el lugar donde se genera la mayoría de los recursos”, dijo Laventure.
A su turno, Antía señaló que “Punta del Este es la frutilla de la torta” y que los recursos que reclaman “no son un capricho” municipal. “Siempre nos dicen que Punta del Este es un sello y un símbolo, más que Maldonado. En este momento estamos de acuerdo con el presupuesto asignado si la intendencia nos cubre ciertos rubros”, dijo.
Se necesitan respuestas para todo el año
El concejal Julio Pérez apuntó que, después de la pandemia por coronavirus, Punta del Este pasó a ser un balneario de todo el año, con la llegada de turistas de todo el país durante los fines de semana. A su juicio, esto obliga a atender las necesidades no sólo durante la temporada alta.
“Quiero que al de un barrio de Maldonado, del casco de Maldonado, se le arregle la vereda. Pero si quisimos traer gente y hoy tenemos muchísimos uruguayos de todo el país en Punta del Este, tanto viviendo en forma permanente como viniendo todos los fines de semana y trabajando los comercios, tenemos que darles una respuesta, y en esa respuesta nos están faltando detalles importantes”, comentó.
El concejal Rodrigo Arango agregó que el municipio “pasó de ser netamente administrativo a ser un centro cívico por donde pasan infinidad de personas, cursos y actividades; para que siga creciendo tanto la ciudad como el municipio como institución, el presupuesto tiene que acompañar ese crecimiento”. Por su parte, el concejal José Gordillo opinó que “en estos momentos el municipio está trabajando casi con las manos atadas, porque no hay personal para hacer todas las cosas que hay que hacer”.
Ahora preocupa una caída en el presupuesto asignado a vigilancia y seguridad, y para la contratación de docentes de cursos municipales. Con las cifras previstas, no se podría cubrir las guardias en puntos como la plaza Artigas y la pista de skate, comentó la concejal, a modo de ejemplo.
Entre obras pendientes y por definir
En el listado de obras figuran la construcción de un pozo de bombeo en el barrio Cantegril, la reconstrucción de Avenida del Mar y el mantenimiento del teatro Cantegril, aunque hay servicios, como la reconstrucción de pasarelas o el mantenimiento de las casetas de guardavidas, que dependerán de las direcciones generales de la IDM, según se observa en el documento presupuestal.
Carballal informó a los ediles que la reconstrucción de Avenida del Mar es una obra que quedó pendiente de la anterior administración y que esperan comenzar “después de la temporada” estival. También empezarán a trabajar en “el eje de Pedragosa Sierra” cuando se defina el plan de movilidad integral que presentará la IDM. En carpeta, además, tienen el compromiso de invertir en la remodelación de Gorlero y de la plaza Artigas, donde funciona la feria de los artesanos.
Las autoridades locales pretenden, asimismo, revertir el “déficit de veredas” y atender tanto la instalación y reposición de luminarias como el problema de robos de cables, en el que trabaja junto con la Jefatura Departamental de Policía. El plan también busca hacer de Punta del Este una ciudad turística más accesible; intervenir la pasarela (de la playa Mansa), que es “el principal paseo” del balneario y que, según el concejo, está en el límite de su vida útil, y mantener y “potenciar” las ciclovías, que son “vitales” debido al crecimiento poblacional del balneario, sobre todo a partir de la instalación de nuevos colegios.
El mantenimiento de la sede municipal, ubicada junto con la antigua Ancap de Gorlero, es otra preocupación. En los últimos años hubo una apuesta de descentralizar los trámites de vecinos o visitantes que solían ir a quejarse a la IDM, además de ofrecer espacio para muestras, cursos y actividades culturales; ahora se entiende necesario contar con recursos para mantener las instalaciones.
“Sabemos que este es un presupuesto carcasa, pero también tenemos que ver qué cubren las direcciones generales [de la IDM] y, si está dentro del plan que nosotros tenemos pensado, bienvenido sea”, dijo Carballal.
No importa quién lo haga, mientras se haga
A las autoridades municipales les desvela que las obras se concreten y que los servicios se cubran, mucho más que perder autonomía para gestionar el territorio. El edil colorado Ignacio Garateguy y su par frenteamplista Pablo Cicero observaron que centrar la gestión en las direcciones generales de la IDM es una forma de perder el papel municipal consignado en la Ley de Descentralización.
También advirtieron que el municipio no puede operar como una oficina descentralizada de la IDM”, sino que debe tener asignado un presupuesto para cubrir las demandas de la comunidad y establecer las prioridades que los vecinos entiendan necesarias. Sin embargo, Laventure resumió una postura general del concejo: “Un tema conceptual es que la gestión pública debe verse como un todo, entonces, no es un objetivo en sí mismo quién hace las cosas, sino que se hagan”, argumentó.
Para el concejal, “lo más importante” es definir claramente cuáles son las necesidades y cuáles son los roles para hacer más eficiente la gestión. “La realidad es que el ciudadano lo que quiere es que le solucionemos el problema. Si se lo soluciona el municipio, el gobierno departamental o el gobierno central diría que le importa poco”, dijo, aunque se definió como defensor de la descentralización.
“Si es más eficiente que lo haga un municipio, bienvenido, pero si es más eficiente que lo haga una dirección [de la IDM], que lo haga la dirección, porque no tenemos que perder de vista que lo importante es darle respuesta al vecino”, enfatizó Laventure. “No importa quién lo hace, lo que le importa es que se haga”, acotó Antía.
De acuerdo con el censo de 2023, en el municipio de Punta del Este hay 18.173 habitantes y 33.770 viviendas particulares registradas; de esas, 8.200 están ocupadas permanentemente y 25.570 desocupadas o en alquiler. El alcalde aseguró que en su administración no hay cargos de confianza ni funcionarios contratados de forma directa por el artículo 30 (ya derogado). La jurisdicción cuenta con 18 funcionarios, nueve de los cuales pertenecen de la fundación A Ganar. “Estarían faltando seis u ocho funcionarios más”, dijo Carballal.