La votación de venias en el Parlamento suele ser, en general, una instancia que se aprovecha para elogiar las virtudes de las personas propuestas para ocupar los cargos, y poco más. No fue el caso este martes en la Cámara de Senadores, que tuvo a consideración las venias de la exvicepresidenta de la República Beatriz Argimón como representante de Uruguay ante la Unesco y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), y de la exvicecanciller Carolina Ache como embajadora en Portugal.
La frenteamplista Blanca Rodríguez se encargó del informe sobre la venia de Argimón. Destacó su trayectoria, el plan de trabajo que presentó ante el Parlamento y su “completa presentación”. Los legisladores del Frente Amplio (FA) fueron quienes más intervinieron para destacar las virtudes de la referente nacionalista, en particular sus cualidades personales; la senadora Constanza Moreira destacó que Argimón fue “coherente con las luchas feministas” y por ese y varios motivos tiene su más “caluroso apoyo”.
Por el Partido Nacional, que acompañó mayoritariamente la venia, la senadora Gloria Rodríguez destacó el “vasto currículum” de la exvicepresidenta. Dijo que se trata de “una mujer nacionalista, de una compañera, de una amiga, de una pionera, y de una vida entera dedicada al servicio del país desde las filas del Partido Nacional”. Destacó que es la “primera mujer en llegar a la vicepresidencia de forma directa” y que llegó “por mérito, por militancia, por capacidad, y por una profunda vocación de servicio público, no por gestos simbólicos”.
Por su parte, el colorado Andrés Ojeda destacó que con esta propuesta, “Uruguay consolida una buena tradición democrática”, que es “no tirar a la basura” y “consolidar el bagaje de quienes han sido vicepresidentes de la República”.
En cambio, el senador colorado Pedro Bordaberry no acompañó esta venia por su postura general de no votar venias para cargos de confianza política en representaciones diplomáticas, porque entiende que esos puestos deben ser ocupados por funcionarios de carrera.
El senador nacionalista Sergio Botana también votó en contra. Si bien dijo que Argimón es “una mujer capaz, preparada, con sensibilidad demostrada en las cuestiones sociales, humanas, y fundamentalmente en las cuestiones unidas al mundo de lo cultural”, personalmente no acompaña “la forma que siguió el ministro de Relaciones Exteriores (Mario Lubetkin) para hacer la propuesta”. “No la debió hacer jamás de modo inconsulto, es una falta de respeto al Partido Nacional”, cuestionó, y añadió que además “mezcló su nombre (el de Argimón) con el de alguien que no tiene la dignidad de la representación de este país”, en referencia a Ache. “Nos hubiera encantado levantar la mano y nos hubiéramos sentido honrados si se hubieran recorrido los mínimos caminos”, afirmó.
En respuesta, el frenteamplista Daniel Caggiani dijo que el gobierno hizo esta propuesta atendiendo a que “las personas no tienen propiedad, son libres”, y “en todo caso es quien es nominada quien debería haber transmitido a su partido político la designación correspondiente”.
La venia de Argimón se aprobó por 24 votos en 27.
Ojeda sobre Ache: la propuesta es “inentendible” y hay “algo raro”
Aníbal Gloodtdofsky, senador frenteamplista, fue el encargado de repasar el currículum de Ache. Sostuvo que se trata de una persona que “no desplaza a ningún diplomático de carrera” y destacó que tiene un posgrado en Relaciones Internacionales y que fue viceministra de Relaciones Exteriores.
El pedido de venia recibió el rechazo unánime del Partido Colorado. El senador Andrés Ojeda afirmó que la decisión no es “en contra de Carolina Ache”, sino que la propuesta es “inentendible”. Y marcó lo que opinaba el FA sobre Ache en el período de gobierno anterior, sobre todo a partir del proceso de entrega del pasaporte al narcotraficante Sebastián Marset. Recordó que el actual oficialismo acusó a la exvicecanciller de mentirle al Parlamento y de reunirse “con abogados de narcotraficantes”. “No sé qué pasó en el medio, qué hizo pasar el odio al amor de esta manera”, comentó, y concluyó que “acá hay algo raro”.
Gloodtdofsky salió en defensa de Ache y dijo que en aquella comparecencia al Parlamento había “una mujer rodeada de cuatro hombres” (en referencia a los otros jerarcas de gobierno que concurrieron, entre ellos el canciller Francisco Bustillo), “que la tenían apretada” y “esa mujer salió a desafiarlos”. La están atacando porque “tienen miedo”, sentenció.
Bordaberry aclaró que no votaría la venia por la misma razón que no votó la de Argimón, pero destacó la “amistad de varios años” que lo une con Ache y recordó que él salió a defenderla públicamente en el caso del pasaporte a Marset. También cuestionó el cambio de postura del FA y, sobre la designación de Ache, dijo que “es un sapo que se tendrán que comer”.
El nacionalista Botana también anunció que votaría en contra y cuestionó el proceder de Ache, tanto en el proceso de entrega del pasaporte a Marset como en su actitud de grabar la conversación que tuvo con Bustillo.
Finalmente, sobre la medianoche y antes de que pudiera considerarse la venia para la futura embajadora en Portugal, el oficialismo votó un cuarto intermedio y la discusión se retomará a partir de las 10.00 de este miércoles.