Edson Arantes do Nascimento, más conocido como Pelé, falleció este jueves a sus 82 años tras estar internado desde el 29 de noviembre. De todas partes han llegado los homenajes del mundo fútbol, que no tardaron en celebrar la vida y trayectoria del único jugador que fue capaz de levantar el máximo logro deportivo a nivel de selecciones en tres oportunidades: campeón del mundo con Brasil en 1958, 1962 y 1970.

Dado que estuvo un mes internado, durante el Mundial de Qatar 2022, el pueblo brasilero esperaba este momento para poder dar el último adiós y que la estrella del deporte dejara de sufrir la etapa final de un cáncer de colon y una infección respiratoria.

La familia del astro del fútbol decidió que el homenaje puede esperar a que Luiz Inácio Lula Da Silva asuma como presidente de Brasil el 1 de enero de 2023. Es por eso que el Estadio Urbano Caldeira, popularmente conocido como Vila Belmiro, casa del Santos Futebol Clube, será el espacio elegido por la familia para que se vele el cuerpo del ídolo brasilero desde el lunes 2 hasta el martes 3 de enero.

De hecho, Lula se refirió al deceso de la personalidad brasileña: “Pocos brasileños llevaron el nombre de nuestro país tan lejos como él. Tan diferente del portugués como era el idioma, los extranjeros de los cuatro rincones del planeta pronto encontraron una manera de pronunciar la palabra mágica: Pelé”.

Además, añadió que tuvo “el privilegio que los brasileños más jóvenes no tuvieron: vi a Pelé jugar, en vivo, en [los estadios de] Pacaembú y Morumbí. Jugar no, vi a Pelé dar un espectáculo, porque cuando él tenía la pelota, siempre hacía algo especial, que con frecuencia terminaba en gol”. El presidente electo de Brasil concluyó su mensaje en el que afirmó: “Se fue a tirar pases en el cielo con Coutinho, su gran compañero en el Santos. Ahora tiene la compañía de tantas estrellas eternas como Didi, Garrincha, Nilton Santos, Sócrates, Maradona. Dejó una certeza: nunca hubo un 10 como él”.

Celebración para el pueblo

A las 10.00 del 2 de enero de 2023 se abrirá el espacio para todo el público y quedará disponible para que quien quiera presentar sus condolencias, lo haga hasta el martes. Allí se retirará el ataúd para que se realice posteriormente una ceremonia en privado y posteriormente enterrarlo.

El ícono deportivo solicitó que se lo entierre en un cementerio privado, donde se disponen los cuerpos de forma vertical. Esto es relevante, ya que Pelé eligió el piso nueve del complejo, en honor a la camiseta que utilizaba su padre, Dondinho, futbolista brasileño en la década de 1940, y también porque desde esa altura se puede observar el terreno de juego del Estadio Vila Belmiro, del club de sus amores, Santos F.C.

Su familia fue un paso más allá, porque ningún homenaje es suficientemente grande para Pelé, y pidió que retiren la camiseta de la equipación en conmemoración de su pasaje por el club y su importancia para todo el fútbol brasilero. Con el Santos ganó dos Libertadores en 1962 y 1963 y dos Intercontinentales en 1962 y 1963, un quinquenio local 1961 a 1965 y 1968.

La madre de Pelé, doña Celeste Arantes, continúa con vida, con 100 años de edad y el cortejo fúnebre pasará por su casa para que ella pueda despedirse de su hijo.

El fallecimiento de una persona tan trascendental para la historia deportiva de Brasil tendrá conmocionado al mundo del deporte, al pueblo brasilero que podrá decirle adiós y su despedida le dará paso a un estatus que hace décadas ya ostenta, el de leyenda.